“No dejes que el ruido de las opiniones de los demás callen tu propia voz interior.” Steve Jobs
“Cállate o di algo mejor que el silencio”. Pitágoras
Desde que nacemos sabemos que con llanto y ruido llamamos la atención de los adultos y a partir de entonces nunca nos detenemos de vivir haciendo ruido o escuchándolo.
Nuestras vidas con las nuevas tecnologías, entre otros elementos, generan ruidos, sin los cuales ya no sabemos vivir. Con las extensiones de nuestros oídos, los auriculares, conectados a nuestros teléfonos celulares, radios, computadoras, televisión y con los vehículos y todas las “doras”: lavadoras, aspiradoras, secadoras, licuadoras, batidoras, etc., que generan ruido.
Vivimos entre ruidos y no sabemos el enorme valor del silencio y su poder sanador. Como estamos perdiendo día a día las facultades auditivas, ya no hablamos, gritamos.
Por ello nuestros políticos se expresan, en su mayoría, con gritos porque no conocen el valor del silencio, nos agobian y agotan con sus gritos y sus métodos de dominio y control basados en el ruido. A propósito de lo expresado, José de San Martin dijo: “Hace más ruido un hombre gritando que cien que están callados”, completando lo anterior con el refrán que dice: “Hacer ruido, para sacar partido” el arma predilecta del expresidente Correa, que no conoce el silencio y si no grita con su voz, lo hace a la distancia con sus mensajes escritos enviados por los teléfonos celulares.
Está claro y expresado en otro refrán: “Mucho ruido y pocas nueces”. Al parecer, algunos de nuestros políticos no conocen el pensamiento de Pitágoras que dice: “Cállate o di algo mejor que el silencio” o como Charles de Gaulle expresó: “El silencio es el arma definitiva en el poder”.
Dejando la política a un lado, recordemos que el ruido afecta nuestra salud y que lamentablemente vivimos en espacios ruidosos.
Nuestras relaciones familiares y profesionales, muchas veces, las realizamos comunicándonos con muchos decibelios y por ello tenemos muchos problemas y quebrantos en nuestra salud.
Los mejores negocios, probablemente en el futuro serán los tratamientos y terapias del silencio y descontaminación auditiva.
Concluiré reflexionando sobre el ritmo en que vivimos, terminará nuestra humanidad en el silencio total, cuando las guerras y bombas con sus ruidos y los desastres naturales, así como otros odios, entre gobernantes y pueblos, destruyan el planeta convirtiéndolo en la tumba silenciosa de los humanos.
Concluyo con otros pensamientos, para que usted saque sus propias conclusiones:
“Nada fortalece la autoridad tanto como el silencio”. Leonardo Da Vinci
“El silencio es solo atemorizante para las personas que sufren verborrea compulsiva”. William S. Burroghs
“Cuídate de los que solo ven desorden en el ruido y paz en el silencio”. Otto Von Bismark