Del Colegio Steiner de Guayaquil en el Museo de la Música Popular “Julio Jaramillo”
Saludo de la Rectora del Colegio Steiner de Guayaquil, en el acto intercultural-artístico, por el Mestizaje americano:
Agradeciendo: primero, a la historiadora Jenny Estrada Ruiz, por auspiciar este encuentro, como Directora del Museo de la Música, desde donde viene irradiando algo más que la memoria de Julio Jaramillo, la valía de uno de los íconos musicales nacionales -el pasillo ecuatoriano- y muchas manifestaciones culturales más. A la Sra. Arq. Grecia Cando-Concejal del Cantón Guayaquil, representando al Cabildo Municipal.
En un acto simbólico intercultural entre los pueblos de nuestra América, que un 12 de octubre de 1492 recibió la llegada de España –por casualidad– la que luego se convirtió en invasión y conquista de todo un continente.
Todos los que estudiamos, desde nuestras bancas escolares, supimos que fue una borrasca o tormenta en alta mar, que obligó a desembarcar a hombres que salieron del Puerto de Palos -España -en son de conquista hacia las Indias, en 3 carabelas: Sta. María, la Pinta y la Niña, comandadas por el Almirante Cristóbal Colón, que quería además de Conquistar las Indias para el reino español, demostrar la ruta más corta hacia ellas. Y que desembarcaron en una isla de las Antillas, a la que nominaron “San Salvador”, porque según ellos -les salvó la vida-
Y a sus habitantes los denominaron indios porque creyeron que habían llegado a las Indias y por añadidura los calificaron de salvajes e ignorantes (no sabríamos, entonces decir, quienes eran los “ignorantes”)
Lo que si podríamos asegurar es, que comenzó ahí la era de la conquista española de estos pueblos, sobre todo por vaciarles sus riquezas; al tiempo que se llevó a cabo el mestizaje americano o el nacimiento de una nueva raza-la mestiza, –raza cósmica o mágica, como la llamó Arciniegas más tarde. De la que somos nosotros y los pueblos de toda América, que, comprobada en siglos posteriores al presente, entre estudios arqueológicos e isótopos radioactivos C 14, eran de alta cultura milenaria, con lenguaje, dioses y estructuras políticas propias. Por lo que el 12 de octubre de 1492 diremos con propiedad, fue el inicio de una interculturalidad racial.
Y es que, dicho sea de paso, nunca hubo (ni hay) razas puras en el mundo, dado a que el hombre fue y sigue siendo nómada, lo que lógico y natural- biológicamente, en su caminar pedestre o a lomo de cuadrúpedos-caballos o elefantes-, en balsas, canoas o barcos, desde los de vapor a aviones supersónicos del presente, se produjo y sigue produciéndose la fusión genética entre varones y mujeres de la raza humana.
Entonces, lo real es que ya en pleno siglo XXI no debe hablarse de españoles civilizados y americanos, indios salvajes. Sino de la interculturalidad hispano-americana, que se inició en 1492.
Aunque más apropiadamente, es hablar en el presente, de una sola raza, ¡La raza humana del mundo!
¡Por la paz del mundo! ¡Gracias!