Nos queda la duda (1)

El diario El Universo, nos informa en su edición del día 3 de noviembre del 2017, en su 1era. Sección, que nuestra eficiente PP.NN (Antinarcóticos), “capturó droga que iba a salir al exterior desde dos haciendas”. Droga que según el mismo titular “había llegado de Colombia y pretendía sacarse por Guayaquil”.

Varias lecturas podríamos sacar de esta noticia, que estremece a la ciudadanía, (1 tonelada de cocaína), encontrada en dos haciendas cercanas a la zona de Puerto Inca, a unos 15km., de Naranjal, valorada en $40 millones (USD).

Debo indicar que la zona de Puerto Inca a Naranjal, es una de las zonas agrícolas mejor cotizadas de la Provincia del Guayas, por su producción bananera y otras frutas de comercialización nacional, de cacao y ganadera, y además, es zona aurífera, de carácter artesanal, que se extrae de esa alta montaña que se ve al fondo de la población, cuyo camino de 5to. orden, parte de Naranjal. Oro que se extrae en buenas cantidades y se comercializa en las provincias de Azuay, Cañar y El Oro, que luego, se revende y distribuye como alhajas manufacturadas en Cuenca, a las joyerías de Machala y de Guayaquil.

Los peruanos, aprovechando las facilidades de ingreso al Ecuador, viajan de Tumbes a Cuenca, y compran estas alhajas al peso y regresan el mismo día a su ciudad de origen.

¿En qué y porqué razones, radican y se sustentan mis dudas y la eficacia de la PPNN? (Antinarcóticos). Veamos:

La droga, viaja camuflada en vehículos, las tres cuartas partes del territorio Nacional, desde la frontera colombiana, hasta llegar a Puerto Inca, para enterrar la droga en tales lugares.

Podrían circular por las vías Cuenca-Molleturo-Naranjal-Puerto-Inca, o la Quevedo-Babahoyo-Durán-Puerto-Inca, o la Quito-Petrillo–La Puntilla-Duran-Puerto-Inca,o la Santo Domingo-Quevedo- Balzar-Daule-Guayaquil-Durán-Puerto Inca. Carreteras por las que, ningún puesto de vigilancia, detecta ningún ensamblaje sospechoso, en tales vehículos, ni descubre el alcaloide que viene (¿en sacos de arroz?), camuflado. Lo cierto es que, recorren tales vehículos ¾ del territorio nacional, sin contratiempo, hasta tales haciendas, para, posteriormente, trasladarla al Puerto de Guayaquil. (?????…….!!!!!!)…….

Aquí hago un gran paréntesis, para retomar el tema de las FARC y el “Acuerdo de Paz” con el Presidente Santos de Colombia, que el pueblo colombiano rechazó en Referéndum, y remitirme a las aspiraciones presidenciales del máximo capo de las FARC; el señor “Timochenko”, cuyo verdadero nombre es: Rodrigo Londoño Echeverri, y reproducir lo que nos dice el articulista colombiano Carlos Alberto Montaner, sobre este “personaje”, al respecto:

“… Descendiente de una familia provinciana del sector medio-bajo. Su nombre real es Rodrigo Londoño Echeverri. Lo sustituyó por el de Timoleón Jiménez como nombre de guerra, pero luego lo sovietizó por el Timochenko, probablemente elegido como un no tan secreto homenaje a Semión Timochenko, el mariscal amigo íntimo de Stalin que murió pocos años antes de que el colombiano llegará a Moscú a “estudiar” (es un decir) en la Universidad Patricio Lumumba, previo su viaje a Cuba a continuar no-estudiando en la isla del Dr. Castro. Sitio donde dicen que concluyó algo relacionado con la medicina, disciplina en la que seguramente resultará más peligroso y letal que como narco-guerrillero, pese al tremebundo dossier compilado por el columnista, Héctor Gómez Kabariq, de quien reproduzco los tres siguientes párrafos”.

El mismo columnista colombiano cita al columnista Héctor Gómez Kabariq, quien describe el perfil de Timochenko, de esta manera:

“El prontuario de Timochenko comprende gran cantidad de actos como secuestro, terrorismo, homicidio, rebelión, reclutamiento de menores, hurto calificado, daño en bien ajeno, narcotráfico, extorsión, conspiración, sedición y concierto para delinquir. El máximo comandante en jefe del grupo guerrillero también presenta 117 órdenes de captura por parte de las autoridades colombianas”. Nota: (Representante de las FARC, en las “conversaciones de Paz”, en la Habana).