Reza un aforismo latino “Vox populi, vox Dei” (La voz del pueblo es la voz de Dios); pero observando la situación general nacional, llego a la conclusión que aún no hay la suficiente articulación para que el pueblo demande cambios, cuando el gobierno dispone medidas que atenten contra sus intereses.
El pueblo somos todos los sectores, ciudadanos, empresas, sector público y no solo “las personas de a pie”, como lo llaman ciertos políticos.
Prudencia, conciencia y cuidado, es lo que ciertos políticos deberían tener con las medidas y acciones que toman, pues más temprano que tarde el pueblo les pasará factura por esos impuestos y contribuciones especiales descabelladas que nos imponen, por esos endeudamientos excesivos, por tanta impunidad y por tanto defensor a ultranza de inculpados en latrocinios contra las arcas fiscales. ¡Qué cara de palo tienen algunos! es más que evidente lo que ha pasado con los recursos de nuestro país y aún así, se atreven arropados bajo el mal llamado “espíritu de cuerpo”, defender a toda costa a sus correligionarios, sin que les importe la gravedad de sus delitos.
Si el pueblo tuviera la voz que debería, ya estuvieran todos en la cárcel, sin tanto circo de por medio. Es increíble a donde hemos llegado; saquean y adoptan posturas de víctima afligida, cuando les toca la hora de responder. La decisión del pueblo debe ser respetada y tienen que implementar los mecanismos necesarios para que puedan expresarla libre y de manera contundente y eso se llama: Consulta Popular. Los políticos saben que el pueblo está luchando su propia batalla día a día y no tiene el tiempo para perseguirlos y evitar que le metan un zarpazo al menor descuido, pues para perseguir esos delitos, deberían estar los fiscales.
El sistema de asedio que se armó en la década pasada, para tener sumiso al pueblo, mientras por la puerta trasera lo desplumaban, acabó.
Los gobernantes deben entender que el poder no es eterno, que solo cumplen temporalmente un mandato, que de ninguna manera se puede transformar en endoso indefinido del poder absoluto.
Sra Acosta, cuando Ud. Se refiere al “ pueblo” y explica que somos todos los ciudadanos y no solo los de apuestas, sin querer( estoy seguro) le hace el juego a la izquierda, del cual Moreno es ahora su cabeza más visible. La izquierda se apodera no solo de las economías de los paises donde logra hacerse del poder, también se apropia de ciertos vocablos cambiándoles el sentido y despojándolos de sus significado histórico.. “El Pueblo” ya no está formado por todas las clases, no, ahora son solo los de apie,los que comen con cuchara y muy pocas veces usan corbata., el resto son pelucones, unos mas que otros , pero pelucones al fin. Yo creo que sería más claro y incluyente llámarnos ciudadanos y ya, creo , más completo más real. Un saludo.