(Una anécdota para compartir)
Como de costumbre, me encontraba, en la cafetería donde asisto religiosamente a tomarme un cafecito, en las mañanas y en las tardes.
Delante mío, en la Caja, estaba una “abuelita” con sus 2 nietas, muy lindas, a quienes las había llevado a esta cafetería a hacerles un agasajo navideño.
Me toco mi turno, solicite mi cafesito y la srta. de la Caja me indico, se lo llevamos a la mesa; siempre lo tomo en la terracita, en el 2do. piso del Riocentro de Samborondón.
Me acerque a la “abuelita” del cuento y la felicité por sus 2 nietecitas. En tono que ellas me escucharan, le pregunte ¿Son sus nietas muy educadas? Si, me contesto, ¿hacen todos los deberes y comen toda la comida? si, me dijo. Luego saque mi celular y le dije “Soy amigo de Papa Noel, y ahora mismo lo llamo para que les traiga los regalos que han escogido”.
Dirigiéndome a la mayor -de unos ⅞ años- le pregunte. ¿Que has pedido para Navidad?. Me contesto: “Una Tablet”, la otra, de unos ⅚ años, me contesto: “Un Ipod”.
Les dije, yo pensé que pedirían una muñeca, pero no, es lo que ahora quieren los/as niños/as de esas edades.
A mi nieto, Gabrielito, sus papás le hicieron similares regalos cuando cumplio 5 años. (tiene 7 en la actualidad).
A mi hijo Gabriel lo “perdimos”, cuando a los 12 años, le regalamos una computadora.
Se encerró en su dormitorio y teníamos que apagársela, a la hora de cenar.
Ahora, es lógico, con el avance de la Tecnología, a los niños/as, les interesa, a esa edad, los “juguetes” electrónicos.
También se alejan, no les agradan las conversaciones familiares, les hemos de parecer unos viejos aburridos, cuyos temas, no los entienden, o no les interesan.
Por suerte, los domingos en casa de mi cuñada Marilu, hay un buen patio de césped y con los/as primitos/as, se desbaratan jugando a la “pega”. Estoy seguro que ahora este juego, ya no se llama asi, pero, pasan divertido.
Cuando, los primos se van a la playa, y no llegan al cafecito, mi nieto Gabrielito, aprovecha para entretenerse con su tablet, o su Ipod.
Los sábados y domingos, sólo viste del uniforme de sus equipos favoritos. Su pasión es el futbol y también lo practica en su escuela.
En alguna ocasión, como premio por su buena libreta, lo llevé a la juguetería, para que escoja su regalo, máximo de $15,oo. Le sugerí una cuaderna para colorear con marcadores. Me dijo, “Abuelo, eso es aburrido”. Se decidió por un transformer.
Sus programas favoritos, más allá de los infantiles, son los programas de futbol, nacionales e internacionales. Es un experto, se sabe el nombre de los mejores jugadores, el nombre de los Ds.Ts, de los árbitros, de los estadios de los diferentes países. etc.
Yo le consulto a menudo, no siempre me para bola, le molesta, -presumo- mi ignorancia en la materia.
Asi es la vida- ¿Tenemos que aceptarla o debemos cambiarla? No lo se. Uds me dirán sus experiencias, pueda ser que coincidamos.
Seguro estoy, que mi esposa, si sabe que regalarles.