Hay en el mundo fuerzas e intereses que persiguen la unificación en un gobierno global utilizando la economía, las nuevas tecnologías, la salud, la investigación, las normas, leyes universales y más que chocan con los acuerdos y fuerzas regionales que trabajan en unificar continentes con acuerdos, monedas, leyes y mas, como la Unión Europea y los tratados multinacionales de todo tipo en varias zonas del planeta.
Estas iniciativas y acuerdos, también en sus propias fronteras, chocan con tribus dentro de sus propios países. España es un ejemplo con Cataluña que busca su independencia, como otros, dentro de la Unión Europea y en este acuerdo continental, el Brexit, proceso de ruptura y separación del Reino Unido de dicha unión.
Podríamos poner mas ejemplos, pero simplificando para tratar de entender estas fuerzas en conflicto, las integradoras y las separatistas y desintegradoras, utilizaremos el concepto tribal, sin ningun sentido peyorativo, para tratar de explicar lo que genera los choques culturales.
Los humanos recorrimos nuestra historia pasada y seguimos en el presente funcionando con el concepto tribal con el que nos identificamos por razones culturales y muchas mas, para sumar tribus y formar naciones, y en unión de tribus formar otras asociaciones de uniones, desde económicas, pasando por raciales, religiosas, idiomáticas que podríamos manejar con el concepto cultural.
El planeta está inmerso en una situación similar a una torre de babel, con enormes diferencias que nos separan y asi también enormes intereses y necesidades que nos motivan a unirnos y asociarnos por razones planetarios y supervivencia de la humanidad.
Las tribus del Reino Unido por cultura y otros aspectos, no aceptan ceder espacios y autonomías a la Unión Europea liderada por Alemania y Francia, eternos e históricos, llamémoslos competidores. Las tribus catalanas, su complejo de superioridad y sus aspiraciones económicas no soportan las normas de las otras tribus españolas.
Pienso que el complejo tribal es aun muy fuerte en todas las regiones del mundo y que el proceso de unificación debe armonizar muchos intereses culturales, económicos, idiomáticos, de salubridad, poder, libertades económicas y usted puede añadir muchas más.
Por lo expuesto en forma muy reducida, la fuerza integradora de un gobierno mundial choca con mucha fuerza con la desintegradora de las diferencias económicas culturales y más de la larga lista de tribus que habitan nuestro planeta. Creo que cuando tengamos que enfrentar problemas globales, epidemias, catástrofes climáticas mundiales y todo lo que nos afecta a todos entenderemos que somos una sola humanidad y deberemos trabajar en armonía aceptando y respetando nuestras diferencias siempre y cuando todos respetemos los valores universales, los derechos humanos y más normas planetarias medioambientales y la eliminación de las guerras por la paz mundial.Solo así podemos construir una cultura global en beneficio de todos