21 noviembre, 2024

Tarjeta Roja al patán

El mundial de fútbol entró a octavos de final y cada día nos da más sorpresas. Los equipos más pintados, por su calidad y habilidad en este deporte, se están quedando en el camino, mientras que algunos considerados como emergentes sobresalen y pasan a etapas importantes de este torneo.

Una situación similar ocurre en nuestro país y su ambiente político. Los que se creían “cracks” de la política ecuatoriana durante la década perdida, están siendo expulsados, apresados y procesados por delitos con posibles repercusiones criminales. Hasta “cheerleader” tenía el equipo de la nefasta década, pero ese lado del grupo todavía no cae, pareciera que supo mover la cintura y con piruetas de alta peligrosidad, salir campante sin que le caiga el hacha.

Hemos visto y escuchado las declaraciones desagradables del ex número 10 de Alianza PAIS en referencia y ataque directo al actual presidente de la República. Por supuesto, no deberían asombrarnos las barbaridades que dijo, porque él siempre se refirió a sus adversarios con adjetivos descalificadores e insultos callejeros.

La miseria humana de proporciones inmundas le aflora cuando llega al nivel de regodearse con la desgracia que le ha tocado vivir a otro ser humano. Eso es inaceptable e inhumano. Demuestra claramente que no tiene ningún tipo de escrúpulo ni argumento de fondo para defender su posición; por el contrario, sabe que carece absolutamente de una defensa sólida que le permita zafarse de los hechos delincuenciales de los que se lo acusa.

Como dijo Paulo Coelho, “la ignorancia se mide en la cantidad de insultos que usan, cuando no tienen argumentos para defenderse”. Este pobre ser humano está enfermo porque se encontró, de un momento a otro, despojado del desmedido poder que ostentaba y sin la corte de adulones y mequetrefes que lo acompañaban y que ejecutaban sus órdenes sin chistar.

¡Qué más se puede esperar de un individuo que tiene denuncias de todo tipo, desde un “supuesto acoso”, hasta un supuesto secuestro! A los árboles los conocemos por sus frutos. ¡Tarjeta roja al patán!

 

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La Semana Santa explicada con claridad

1.     
Para entender los sentimientos de Jesús en este
día
recordemos que durante
tres años, Él ha llevado a cabo innumerables milagros con los que ha remediado
las carencias materiales de las gentes. Su popularidad es inmensa. Los líderes
religiosos lo odian, no por Sus extrañas ideas; no. El problema entre ellos y
Jesús no es ‘cerebral’, sino ‘visceral’: le tienen rabia porque Él les ha
desenmascarado ante el pueblo por sus indecencias y vilezas, y le envidian por
Su popularidad: la masa sigue y admira a Jesús. Por otra parte, en tiempos de
Jesús, Palestina está sometida al poder de Roma.[1]
En el pueblo hay verdadera sed de independencia económico-político-social. La multitud
ve en Jesús al líder capaz de liberar a Israel del imperialismo colonizador de
Roma. Jesús entra en Jerusalén y el populacho, muy ‘arribista’, lo aclama como
al político que viene y que, seguro, ganará las elecciones. A pesar de los vítores,
Jesús se siente completamente solo, porque sabe perfectamente bien que toda esa
gente que le aclama el Domingo de Ramos, que, además, se había beneficiado de
sus milagros, ingratamente, le dará la espalda, se volverá contra Él y pedirá a
gritos su muerte el Viernes Santo: Mientras
estaba en Jerusalén por las fiestas de Pascua, muchos creyeron en su nombre,
viendo los signos que hacía; pero Jesús no se confiaba con ellos, porque los
conocía a todos y no necesitaba el testimonio de nadie sobre un hombre, porque Él
sabía lo que hay dentro de cada hombre
.[2]

Los nuevos pelucones

Los cambios que se producen al subir un nuevo gobierno, son cambios de cabezas, no de estructuras. Todos los Gobiernos prometen muchos cambios a favor del pueblo, en unos casos se promueve mayor vigilancia en los gastos y en casos como el actual, se crea una infraestructura gubernamental con gran creación de cargos públicos, dando puestos de trabajo dentro de la maquinaria del estado a gente afín al partido, a costa de un presupuesto inflado, que se pretende alimentar con impuestos y cargas tributarias.

Mantener, aparte de esto, el bono solidario, significa un gasto que mantiene al Estado al borde de la quiebra y endeudado con grandes intereses para poder sobrevivir. Aunque esto es un problema grave, el compromiso del Gobierno con el pueblo que votó por él y contra él (porque en una democracia, ayudan a la elección los votos a favor y en contra, al permitir una elección libre), obliga a hacerlo.

2 comentarios

  1. Mi distinguida Abogada, mis respetos por su escrito, de guante blanco pero certero. Le agregaría algo, patán cobarde, la cobardía la escondió con ataques más cobardes cada vez que podía abusar del poder. El gran cobarde se enfrentó a un niño, a una mujer, a cualquier desprotegido usando la fuerza de sus esbirros más no la suya propia porque nunca la ha tenido. Esa es la característica del cobarde, abusa con el desvalido, vocifera y se hace el valiente en 30 S cuando está seguro porque es el autor de la farsa, y después aprovecha su posición de fortaleza para atacar, calumniar y avasallar a los verdaderos valientes que se atrevieron a enfrentarlo. Por eso teme la cárcel, porque es un cobarde. El valiente dice: » A lo hecho, pecho», y se hace responsable y va preso porque no tiene miedo a enfrentar su verdad ( como no tiene ninguna verdad al parecer… )

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