Querida Cynthia, me permito escribir estas breves palabras desde el corazón, porque a más de ser un ferviente guayaquileño y socialcristiano, te conozco desde mucho antes que entraras en el ambiente político, sé de tu valía como persona, sé de tu amor por el prójimo y más que todo, sé que las historias que cuentas sobre tu pasado son ciertas y no simplemente cuentos para sumar votos por elecciones.
Nos volvimos a encontrar, cuando fuiste parte inicial de ese grupo del cual yo aún tengo el honor de pertenecer, y que de la mano del presidente Febres Cordero, en un principio, asumimos con entereza y humildad el desafío de cambiar a Guayaquil, tú, fuiste parte importantísima de esa campaña “Guayaquil vive por ti”, que nos devolvió el autoestima por ser nacidos o vivir en esta libérrima ciudad.
Tu amor por el servicio comunitario, te enrumbó al camino más adecuado y como a algunos de nosotros, nos orientó a asumir a la política como una herramienta para servir, más no para servirnos; tu carisma, tu bondad, sencillez, inteligencia y don de gentes te han puesto en el sitial que te mereces, te has ganado a pulso, el corazón de muchísimos guayaquileños y porque no decirlo, de ecuatorianos también.
Tenemos la plena confianza que, de Guayaquil y su gente, premiarte con la distinción de ser nuestra representante, estaremos en las manos adecuadas para que nuestra ciudad se siga desarrollando, pero así mismo, cargarás con un gran peso sobre tus hombros, porque te precedieron desde agosto del año 92, dos grandes guayaquileños que dieron inicio al gran cambio el primero y a quien supo mantener a esta tierra hermosa como ejemplo, ya no solo para propios, sino que ahora orgullosamente a rebasar las fronteras patrias el segundo y actual Alcalde, Jaime Nebot Saadi.
Cynthia, eres una mujer de temple, de eso no dudo ni por un segundo, has tenido como ejemplo y guía a dos de los políticos más representativos de las últimas décadas y más allá de eso, tienes en nosotros un grupo de guerreros que como tú, anteponemos nuestros intereses, a los intereses de los que más necesitan y que caminaremos junto a ti, porque nos representas y sentimos que contigo, esta ciudad y sus habitantes, seguiremos siendo el ejemplo a seguir. Mi voto y mi cariño, POR TI GUAYAQUIL, CYNTHIA NUESTRA ALCALDESA.
Si hay algo que nunca me ha gustado es escuchar a un aspirante a puesto público decir que lo hace por” los interese de los que más lo necesitan “. Siempre prefiero quien diga y lo haga, que luchará por los derechos de todos los ciudadanos. Cuando se busca servir, se sirve y punto.
FRANCESCO, FRANCESCO,…, «anteponemos nuestros intereses, a los intereses de los que más necesitan y»,…, POR FAVOR, corrige, corrige. Por ti Guayaquil, Cynthia nuestra Alcaldesa..
Desde luego. Cynthia responde al bien común.