“Dirán que queremos meter mano en las cortes;
sí, queremos meter las manos: para bien del pueblo ecuatoriano …
Tenemos que cambiar el sistema de justicia, compatriotas”.
Baeza, Napo, 8 enero 2011
Rafael Correa es el principal responsable por la pérdida de juridicidad del sistema al haber durante años manipulado los dictámenes de las cortes de justicia a favor de sus causas personales y particularmente las de su régimen. Sin embargo, no es el único culpable de la generalizada debacle institucional porque nada podría haberse consumado sin el apoyo, aveniencia, complicidad o encubrimiento de muchos otros actores en el quehacer político nacional.
El veredicto adverso en el caso Chevron era ciertamente esperado y ya no hay nada que hacer fuera de esperar el monto del fallo del Tribunal Permanente de Arbitraje. El juicio de reparación solicitado por el Gobierno a la Procuradoría General del Estado sin duda se enfocará en Correa como cabecilla de la cuadrilla. La sociedad en su conjunto es corresponsable de lo sucedido y por ende sufrirá los estragos económicos de la pena que se impondrá sobre el Estado.
Lenín Moreno se debió a Correa desde el 15 de enero de 2007 hasta el 24 de mayo de 2017 y como tal guardó siempre un solidario silencio ante los múltiples actos ilegales e inconstitucionales promovidos desde Carondelet. Una aparente lealtad a la Patria resucitó luego de diez amnésicos años de revolucionario contubernio y devoción por su jefe. Quien calla, otorga, y en política más aún. Moreno no es menos culpable.
Acertado artículo, Gonzalo:
La prepotencia y la demagogia, nos condujeron a esto.
El daño ya está hecho. Hagamos lo que hagamos no nos libramos de las consecuencias económicas del crimen contra nuestro propio país, cometido por el anterior Presidente que, como muy bien señalas, se hizo con la anuencia de su grupo, que incluía al actual Presidente.
El problema que afrontamos, es que muchos de sus partidarios, cómplices y encubridores, continúan con cuotas grandes de poder y están haciendo hasta lo imposible para lograr el sobreseimiento del gigantesco atraco que realizaron al país. Es necesario exigir que haya mano dura no sólo para encarcelarlos, sino para que paguen lo robado. El o los responsables de las pillerías, deben ser los que paguen esas multas.
Felicitaciones y un fuerte abrazo.
JFGR