El médico radiólogo ecuatoriano Glenn Mena ha publicado en la revista científica ‘Open Journal of Radiology’ un estudio que demuestra una mejor estimación del riesgo de malignidad en nódulos tiroideos usando un nuevo modelo predictor ultrasonográfico, denominado ‘Alpha Score’.
En entrevista con REDACCIÓN MÉDICA, Mena ha detallado que el estudio fue realizado en 429 pacientes ecuatorianos, en cuyas ecografías se detectó nódulos tiroideos potencialmente malignos y que ameritaban una confirmación a través de una punción-aspiración con aguja fina (PAAF).
Se estima que hasta el 67 por ciento de la población puede presentar un nódulo tiroideo, sin embargo, menos del 10 por ciento son malignos.
De allí que, para evitar punciones innecesarias era necesario determinar el verdadero riesgo de malignidad creando un nuevo modelo predictor ultrasonográfico y que “demostró ser una herramienta útil, de fácil interpretación y aplicación”, ha explicado el investigador.
El modelo de predicción
Diversos autores, asociaciones y consensos internacionales han propuesto sistemas de categorización ultrasonográfica de los nódulos tiroideos que permiten clasificarlos, seleccionarlos y detectar lesiones que ameriten la confirmación a través de una punción.
Sin embargo, estos sistemas a menudo tienen una limitada practicidad o reproducibilidad y por ello incluso ninguna de esas clasificaciones ha sido aceptada universalmente, ha explicado Mena.
“Tenemos muchas clasificaciones, muy buenas, pero generan confusión. El afán (de la investigación) era crear un modelo de fácil uso, comprensión que pueda ser usado por los médicos radiólogos, ecografistas e inclusive endocrinólogos entrenados”, ha reiterado.
Según ha explicado el especialista, su modelo dispone de “una calculadora automática creada en Excel, donde se ingresan los datos (de la ecografía) y automáticamente el ‘Alpha Score’ establece todos los parámetros, evalúa el puntaje y determina el riesgo de malignidad”.
“Este modelo evita punciones innecesarias o va a seleccionar adecuadamente el nódulo del que sí se requiere”, evitando así gastos inútiles y preocupaciones a los pacientes, ha concluido Mena.