«Yo no he ahuev…»: Ex-Presidente L.F-C.R. (+)

Le escuche decir al Ing. Febres-Cordero, esta frase, en una entrevista en Miami, no recuerdo, después de cual de sus operaciones, en un famoso Hospital de los EEUU.

Y fue cierto, al Ing. Febres-Cordero, no le tembló la mano frente a los terrorista de “Alfaro Vive Carajo” (A.V.C.), entrenados por Sendero Luminoso en el Sur del Ecuador (Perú), y por el M-19, en el Norte, en Colombia.

Gracias al Ing. Febres-Cordero, no tuvimos el problema colombiano por + de 50 años con la FARC, grupo terrorista armado, dentro de la misma Colombia.

Gracias al Ing. Febres-Cordero, se desmanteló a los A.V.C., que, mataron y violaron a representativas personas de El Oro y de la Provincia de Loja, en el Sur, y en nuestra Capital. Crímenes horrendos por los que no pagaron, sino unos pocos, que los premiaron con prisión por pocos años, que entre compañeros de celda se auto eliminaron.

Tampoco le temblaron las manos para dictar los Decretos Ejecutivos que impulsaron la agricultura, sobre todo de exportación.

Tampoco le temblaron las manos para concluir la Av. Pedro Menendez Gilbert y la Av. 25 de Julio, avenidas que quedaron inconclusas por la trágica muerte del ex-Presidente Roldós Aguilera, pero, el Presidente Hurtado, que le sucedió, siempre se olvidaba de crear una partida presupuestaria para concluirlas. El Ing. L.F-C.R, tan pronto asumió al Poder, las arreglo en tres meses.

Tampoco le temblaron las manos para dotar de infraestructura deportiva a todos las provincias del país, de la Costa y Sierra ecuatoriana. Ni de dotar a Quito de Luz eléctrica y Agua Potable.

Recuerdo que en una Reunión Mundial del Banano, de mucha importancia para el Ecuador, en Quito, en plena reunión, se fue la Luz y esta Asamblea Mundial, tuvo que terminar sus reuniones, sin dictar las resoluciones favorables para el Ecuador, ante la competencia de Colombia y las prebendas de los países europeos para favorecer a sus ex colonias, gravando desmedidamente las exportaciones bananeras ecuatorianas, a esos mercados.

Tampoco le tembló la mano, frente a Fidel Castro, e intercambiar con él regalos personales (cigarros ecuatorianos Vs. caballos de paso), sin declinar en su postura de representar una tendencia Capitalista, reguladora del mercado, ante las diferencias entre grandes y pequeños productores.

Ni al crear una Bolsa de Productos no perecibles y áreas de almacenamiento de productos agrícolas no perecibles, cuyas ventas anticipadas se transaban en dichos establecimientos para sostener el precio de los productos agrícolas de exportación y de consumo masivo.

El Gobierno del Ing. F-C.R, soportó un terremoto en el Oriente y algunas rupturas del oleoducto trasandino ecuatoriano. Ni le tembló la voz para llamar a su par colombiano, para que construya un oleoducto que una el colombiano con el ecuatoriano, que fue paga con crudo.

Tampoco le temblaron las piernas para ir a Taura, donde se tramaba un golpe de estado. Una bala a su cuerpo, no le llegó, gracias a un guardia de su seguridad que puso el suyo, pero, fue vejado y obligado a firmar ascensos, obligado a firmarlos con un resolver sobre su cabeza.

Tampoco le temblaron las manos, ni las piernas para convocar a las grandes empresas y empresarios norteamericanos para que inviertan en el país, liberándolos de los engorrosos trámites del B.C.E., que aunque que parezca mentira, prácticamente, sus regulaciones entorpecían el ingreso de capitales extranjeros al Ecuador.

Un terremoto en el Oriente ecuatoriano y varias rupturas del oleoducto, en esa zona ecuatoriana, paralizaron la exportación de petróleo del Ecuador, que se realizó, gracias a sus buenos contactos con su par colombiano, que construyó un oleoducto que empató con el oleoducto ecuatoriano y lo pagó con crudo. Casi dos años, el país no exportó petróleo.

Tampoco le tembló la mano como alcalde de Guayaquil, clausurando el Cabildo Municipal, al que calificó de “Cloaca”, para convertirlo en un Banco de inversiones, para las obras de regeneración de Guayaquil, fundamentales: -agua potable, alcantarillado, pavimentación, escenarios deportivos-, etc.

Tampoco le tembló la voz, para denunciar, como legislador, el manejo de las “muñecas de trapo” que tanto enojó a los miembros de la P.P.N.N.

Sus gestiones con Presidente del Ecuador, y como Alcalde de Guayaquil, fueron insuperables.

Y todo lo que hizo, en carreteras, establecimientos escolares, complejos deportivos, mejoramiento de la agricultura y sostenimiento de sus precios, etc. lo hizo con un precio de petróleo de exportación promedio anual de $12,oo el barril de petróleo.

¿Tuvo o no tuvo el Ing. F-C, las agallas necesarias para gobernar bien el país y para sacar a la ciudad de Guayaquil de la cloaca, en la que se había convertido?.

Estimado lector ¿comparte o no, Ud. esa “frase atípica” del Ing. L.F-C. R?