Por acción, omisión y complicidad a la R. Bolivariana que, con los petrodólares de los “venezolanos” silenció a Latinoamérica y el mundo. En tres fallidos diálogos (incluye, mediación Papal), se impidió el ingreso de la ayuda humanitaria desde 2016 a un Pueblo asesinado con las balas, tortura, falta de alimentos, hospitales y medicinas en 20 años de socialismo-comunista. El 23F mataron a 14 e hirieron a 285 ciudadanos indefensos que claman libertad.
Quemaron salvajemente “alimentos y medicinas” y bailaron cual diablos su victoria a la ¿ineptitud de ingresar-ayuda apelando a la “mínima-sensibilidad” que no tienen estas víboras-ideológicas? Se pidió “resguardo-militar” y los Cascos Azules de la ONU estuvieron ausentes por la complicidad de los socialistas Guterres, Espinosa, Bachelet y Mogherini (PE), con los “no-alineados”, “bien-alineados a Rusia y China”. Lo advertí (si, sólo con civiles indefensos, más de 60 militares escaparon y reconocieron a Guaidó, denunciando a colectivos con “uniforme-militar” y cubanos que los pesquisan, torturan y asesinan al Pueblo militar y civil).
Igual en Nicaragua, su parlamento aprobó el ingreso de militares cubanos y venezolanos. Guaidó no debe seguir exponiendo al Pueblo ante estos sátrapas y como “última-opción”, debe pedir el ingreso de la “coalición-militar” por la libertad, paz y democracia en la Amaruka; y más del 80% de los uniformados reconocerán a Guaidó y ayudarán a apresar a estos criminales. El terror son los colectivos, guerrilleros, delincuencia, Hezbolá y mercenarios cubanos-rusos-árabes. El general Cliver Alcalá denuncia a los 2000 generales (en su mayoría, corruptos). El ejército no puede reconocer a Guaidó por el G2-cubano que también, vigila a sus familias. El baile Cilia-Maduro (como Murillo-Ortega, según dicen, ellas son las que mandan), me recuerda al baile, festejo y cánticos de la “dictadura-correísta-