De casualidad, en el lugar donde escribo estas entregas, me tope con un grupo de padres de familia, que determinaban los últimos detalles para viajar con sus hijos a Cancún, como premio a todo un esfuerzo escolar y secundario, de 12 años por lo menos, que dura este periodo de aprendizaje, que los preparará para bien, el resto de sus vidas.
No critico la idea, pero si censuro la reacción grupal, ante mis preguntas.
Cierto es, que México le apuntó al turismo desde hace décadas, para ellos creó, el famoso balneario de ACAPULCO, -hoy venido a menos- y a lo largo de los años ha “creado” otros, con éxito, que atraen a cantidades de turistas de todas partes del mundo.
Bien por los mexicanos, son ingresos importantes para su erario nacional.
Mi cuestionamiento es, a la respuesta unánime a mi sugerencia. Les dije, ¿porque no escogieron las Islas Galápagos? Me dijeron con desdén. No, Galápagos No!!!.
En la época estudiantil universitaria, mis hijos, también optaron por visitar tales balnearios, -incluido Galápagos-, pero, por su cuenta, con 3 o 4 amigos/as.
Dejo aclarado que las instituciones secundarias nada tienen que ver en estas decisiones. Estos viajes son exclusivamente organizados por los padres de familia, reunidos en los “Comite de Padres de Familia”. Sin responsabilidad de las instituciones educativas pertinentes.
Cierto es, que todo viaje, -como experiencia de vida- es necesario y hasta cierto punto valioso. Visitar Las Naciones Unidas, conocer la Casa Blanca en Washington, conocer New York, Miami y otras ciudades de los Estados unidos (USA), fue para mi, una experiencia extraordinaria, que me aporto ideas e ilusiones, que me fueron muy válidas -como enseñanzas- en aquellos años de juventud (15 años).
Me abrió la mente al mundo que hasta aquella edad, no llegaba sino a abarcar, mi ciudad natal -Guayaquil- y otra(s) más, de su entorno. Tenía solamente una visión parcial del Ecuador y…, de repente, mi mentalidad descubrió que el mundo no terminaba ahí, que era mucho más grande que el que yo me imaginaba, ó conocía en aquellas épocas.
Tales chicos, de regreso de Cancún, también adquirirán nuevas experiencias y visiones, pero, mas recordaran las diversiones que las lecciones de vida, de otro tipo de viajes, -no tan placenteros-.
Los americanos (USA), no apuntaron al Turismo, apuntaron al Turismo Comercial -gracias a los cubanos que migraron a este paraiso de ancianos que “huían” del frío polar del Norte del país, en época de invierno.
Los cubanos y los americanos-cubanos, transformaron Miami, hasta convertirla en una de la ciudades más importante de los Estados Unidos (USA). Toda Sudamerica y Centroamerica se volcó, a realizar las compras para traer a revenderlas en sus países de origen.
Era un “boom”, crearon una corriente turística, sin precedentes en el mundo. Hicieron de Miami, la ciudad que hoy es -La Gran Miami- incluido, uno de los Centros financieros más importantes de los EEUU.
Brasil, Argentina, Chile, Perú, Colombia y Venezuela, también optaron por el Turismo, salvo Brasil y Argentina que también optaron por un Turismo Comercial, hoy por hoy venido a menos, por los graves problemas, con las guerrillas y las dictaduras militares, que salvo Colombia, terminaron con la fase turística de aquellos países.
Siguiendo con el tema inicial, les aconsejaría a los padres de familia, para éstas ocasiones, que visiten las Islas Galápagos. A los chicos/as, les abrirá la mente y les enseñaran otros horizontes. Las Galápagos es un lugar ÚNICO en el mundo, por su ubicación, clima, fauna y flora, que difícilmente la encontraran en las playas de otros países.
Ningún país, como el ECUADOR, tiene un Mar así de transparente y cálido como nuestros balnearios. Ninguno como el Ecuador tiene una TRIADA de Balnearios: -Salinas, La Libertad y Ballenita-.Tan cercanos y tan acogedores como esos lugares. Con precios económicos en ciertos casos y en otros no,pues cuentan con hoteles cinco estrelllas, tan caros y cómodos como en el exterior.
Adicionalmente, la “Ruta del Sol”, desde Salinas hasta Manta, les ofrecen, playas; poblados y poblaciones típicas, artesanías, comida y distracciones diferentes y más atractivas que las existentes en aquellos lugares.
Si, cierto es que, las Islas del Caribe, son muy bellas, pero vacacionar en ellas, cuesta un ojo de la cara y la mitad del otro.
Peligros, los hay en todos lados, eso depende de cada joven, por ello los “comités”, cuentan con personas mayores que los cuidarán y los vigilarán.
¿Que tan agradables no serán estos lugares ecuatorianos, que las jovencitas Chilenas y Argentinas viajan anualmente a Montañita y otros sectores cercanos, desde tan lejanas distancias, todos los años, durante sus vacaciones escolares?.
¿Que nos falta para ser realmente un país turístico?
Nos falta educación turística, buen comportamiento en las playas y mayor cuidado ambiental a esos lugares, de parte de nuestross turistas nacionales, que tienen la suerte de visitar esos balnearios: ir, disfrutar y regresar el mismo dia, desde el lugar de donde vinieran. ¿No es esto una bendición que tenemos los ecuatorianos en nuestro país? Seguro que sí.
¿Qué más nos falta?: Mayor seguridad, para propios y extraños. Crear una Policía Turística que vigile, controle los excesos y los exabruptos, que, al ser como son, balnearios masivos, siempre se filtran los indeseables y personas incultas y sin buenas costumbres, para sancionarlos.
Sugiero a los Alcaldes de Cantones con playas, mar o ríos, que establezcan, con Ordenanzas, las llamadas “Zonas Turísticas”, en ellas, con drásticas sanciones para quienes optan por un mal comportamiento o no observan el cuidado necesario para mantener limpias las playas.
La basura, tarde o temprano irá al mar, y ésta atraerá a animales salvajes peligrosos, incluso, podrían ser algunos desperdicios, perjudiciales para su propia alimentación.
No se trata de crear una medida exclusivista para proteger a un pequeño grupo poblacional, nacional o extranjero, sino aplicarles la Ley, a todos aquellos, que violen sus preceptos de conservación y de buen comportamiento.
La vigilancia de la autoridad es indispensable por algunos años, después ya no, por cuanto las nuevas generaciones ya estarán educadas.
Bien por el turismo, en el Ecuador. Bien por los balnearios del Ecuador, bien por el turismo a las Islas Galápagos.
