Bien por el diálogo, presidente Moreno. Ahora reforme el CNE para deshacerse de figuras siniestras que quedaron descubiertas y permitir el paso a figuras nuevas. Esa será la mesa servida de su Gobierno.
Bien por el diálogo, presidente Moreno. Ahora reforme el CNE para deshacerse de figuras siniestras que quedaron descubiertas y permitir el paso a figuras nuevas. Esa será la mesa servida de su Gobierno.