El perfecto inútil o el inútil perfecto

Me encontraba en la “lavadora”, con mi vehículo, y en el área de espera, se encontraba una señora joven (35), que también esperaba la “lavada” de su automóvil.

Como no me es difícil, entablar conversación con personas extrañas, le pregunte: ¿Cómo así estaba ella y no su marido, en esa “lavandería” de vehículos?. Me respondió: “así pasa, yo soy la que hago de todo. Mi marido parece la señora de la casa”, me respondió. Le dije, la verdad es que las mujeres, saben de todo, hacen de todo y nunca se cansan. “Así es”, me respondió y acoto, “en buena hora” (???).

Mi generación, -me incluyo-, nos criaron algo inútiles, (para ciertas cosas). De chico, mi abuela, no permitía, que ingresáramos a la cocina, y si lo hacíamos, nos sacaba de las orejas y nos decía: “la cocina es para las mujeres” (???). Mi madre, continuó con la misma política y años después, mi mujer.

De soltero, nunca viví solo, ni en el exterior, de suerte que, además de calentar agua, en el microonda, para tomarme mi cafecito y fumarme un cigarrillo, En materia de preparación de alimentos, no se hacer nada más.

La generación de mis hijos, al contrario, si saben cocinar, -al menos no se moriran de hambre,-. Mi hijo mayor, cuando trabajaba en Quito -de soltero-, tomó, un curso de Chef. Cocina muy bien, y sirve los platos muy bien presentados, cuando en alguna ocasión, ayuda a mi esposa, en algun domingo, que los invitamos a almorzar.

El título de esta entrega, me trajo el recuerdo, una obra escrita por un trío de escritores colombianos. “El perfecto idiota”, (latinoamericano), de un contenido muy distinto al del “perfecto inútil”. No conseguí la obra en Guayaquil y nunca la leí, pero tuvo buenos comentarios, posiblemente en las décadas del 70/80 del siglo pasado.

ILUSO: según el DRAE (Diccionario de la Real Academia Española), significa: “SOÑADOR”. INÚTIL, significa según el mismo DRAE, “No util”: en el sentido que, algo se daño, o no sirve, o no es necesario”.

Prefiero el concepto generalizado del español latinoamericano: “Que no es bueno para nada”, a contrario sensu “del todólogo”, que hace de todo. Me incluyo en el concepto de no ser bueno para ciertas cosas, por ej. para cocinar.

Sin embargo, les comento, que a esta edad, que tengo más tiempo, me estoy interesando en la cocina y la acoso de preguntas a nuestra empleada, ¿como se prepara, tal o cual plato?, que a ella se le ocurre preparar, cocina muy bien.

Lo que no me anima del todo, a la preparación de los alimentos,es: enjuagarlos, cortarlos y empezar a prepararlos, peor aún, aquello de lavar los utensilios utilizados.

Yo creo que no nací, para ser buen cocinero, ni siquiera como hobbie.

Mejor me quedo de teórico de la preparación de alimentos y cuando mi empleada renuncie, o ya no esté mi esposa, me ire a vivir a un refugio de ancianos, como el “Hogar de San José”, o alguno más económico.

Que Dios me dé fuerzas para superar mi ancianidad, que aun no me llega.

Ya les contare como me va, si todavía tengo, memoria, visión y puedo aún escribir con mis propias manos.