Valiosos fueron los instructivos señalados, en el mes del abril, por la Ministra de Educación del País y sus voceros institucionales.
Y es que siendo la educación, parte vital de los pueblos, debería ser tomada en cuenta, dentro de las estrategias para salvarla del exterminio, que la fatal pandemia del coronavirus está azotando al mundo y por tanto a Ecuador.
Entre ello señalaba la decisión gubernamental, en cuanto al inicio del año escolar:
(Textualmente algunos fragmentos de sus señalamientos -Diario Expreso-abril 07/2020)
“Las clases arrancaran el 4 de mayo en todos los Planteles: fiscales, fiscomisionales, municipales y particulares del ciclo Costa, bajo la modalidad virtual…”
“Durante las primeras dos semanas de labores se realizarán actividades, mediante el uso de medios tecnológicos…”
“Las instituciones educativas que no cuenten con plataformas tecnológicas pedagógicas de educación virtual, deben aprovechar el uso del portal del Ministerio de educación…”
Vale anotar, que desde antes de dicha publicación, los directores académicos y profesores de algunos colegios particulares, estaban ya realizando sesiones de trabajo preparatorio -on line- de su acción pedagógica para llevar a efecto ese “arranque” en fecha señalada; que luego la suspendieron para junio, de la misma modalidad: desde casa entre maestros y alumnos, con ciertas reglas señaladas por el Plantel con ayuda y control de padres y las respectivas revisiones y calificaciones; para continuar al regreso, en los planteles educativos…
Algo mediato y fundamental de anotar, el asunto del material escolar; refiriéndose a los colegios particulares -porque a los fiscales, el gobierno debe contarlo entre sus provisiones-
Bien sabemos que en la enseñanza-aprendizaje no puede prescindir de ellos, especialmente: libros, cuadernos, plumas y tantos elementos básicos junto a los técnicos del mundo cognitivo electrónico.
A los padres de familia, les corresponde considerarlos en el presupuesto de vida y salud, de sus hijos, como imprescindible.
Y a los directores y maestros de Colegios en situaciones críticas -como ahora- solo pedir lo básico.
En cuanto a “la congelación del pago de pensiones y matriculas de los colegios particulares” los padres antes de inscribir a sus hijos debieron hacer los cálculos dentro de su presupuesto familiar, para cumplir. Este es el momento de saber si ese rubro puede seguir en vigencia o no. Si para alguno la crisis es solo accidental podría solicitar a la Dirección del Plantel prorroga mediante firma de compromiso legal -con fecha a cumplir.
Si no, buscar el Plantel de acuerdo a sus posibilidades económicas: Vivir la realidad, es la mejor lección formativa, que se puede dar a un hijo.
Todo ello, tomando en cuenta, que los Colegios particulares tienen también presupuestos, con rubros que cumplir: pago salarios a profesores, personal administrativo y de servicio, más personal técnico de mantenimiento; todo con fondos productos de las pensiones de los alumnos, que al no tenerlos tendrían que ser despedidos; aumentando la crisis nacional de millones de familias sin sustento…
Por lo que, las autoridades gubernamentales: si bien deben considerar a la educación nacional, dentro de una sola estructura pedagógica eficiente para los millones de alumnos de escuelas y colegios de la Patria ecuatoriana; tiene que hacer consideraciones diferentes en canto a su mantenimiento.
Mas aun en época de crisis como la que estamos viviendo del “sálvese quien pueda…”
“Por la paz del mundo”