“Las diminutas cadenas de los hábitos son demasiado delgadas para sentirlas hasta que llegan a ser demasiado fuertes para romperlas.” Samuel Johnson.
“Solamente aquel que contribuye al futuro tiene derecho a juzgar el pasado. Friedrich Nietzsche
“El pasado y el presente son los medios, nuestra meta es el porvenir. El tiempo amortigua las pesadumbres y desavenencias porque en el cambiamos y nos convertimos, en cierto modo, en otras personas.” Blaise Pascal
Con los pensamientos de los grandes pensadores de la humanidad trato de definir la actual experiencia de vida de toda la humanidad, la toma de conciencia planetaria y la búsqueda mundial de la solución al problema de salud, común a todos los continentes y países, que no distinguen ni razas, ni poderes, ni riquezas, ni regiones, ni costumbres o tradiciones. El covid-19 ha marcado, en términos deportivos, el más espectacular gol mundial a la humanidad en los tiempos modernos.
Esto significa un gran cambio en nuestros hábitos diarios de vida. Muchos habrán visto y comentado, tanto en los medios de comunicación como en las redes sociales, que debemos cambiar nuestras formas de saludar manteniendo la distancia y en occidente el saludo estrechando manos y/o abrazos.
Es un requerimiento de salud mundial mantener la distancia, ya que al parecer el covid-19 nos va a acompañar por mucho tiempo. Estas distancias físicas afectarán nuestros contactos emocionales, siendo además que mantendrán el lavado y desinfección continua de las manos.
Si lamentablemente llegamos a contagiarnos y no mantenemos los cuidados y distancias y contagiamos a nuestros seres queridos, cómo vamos a sentirnos y reaccionar.?
Por ello, pienso que el virus nos está educando en varios campos. El primero es distanciarnos, el segundo es aprendiendo a vivir en las cárceles de nuestras propias viviendas; el tercero, encontrar nuevas formas de trabajo, vida, entretenimiento, abastecimientos y un largo etcétera. Sin saber si volveremos a nuestras costumbres y distancias del pasado.
Acaso todos estos hechos han sido planificados para un control mundial de la población y para nuevos sistemas de gobierno y económicos, asi como de libertades, tradiciones y costumbres.?
Nuestros hábitos cambiarán, pero lo harán nuestros miedos, nuestras libertades, nuestras creencias y más.? Nos resignamos y renunciamos o reflexionamos y reaccionamos.?
Cada cual debe responderse y/o resignarse o con sentido común y cuidados sanitarios defender sus libertades y sus vidas.
No podemos resignarnos a perder todo un legado de costumbres que son inherentes a nuestra cultura, raza, ideología . Temporalmente, podremos adaptarnos a seguir protocolos, como se los llaman , pero una vez estemos fuera de peligro, ( ojalá y no “aparezca” otro virus), retomaremos todo aquello que nos identifica , que es parte de nuestra personalidad y que es la forma como transmitimos nuestros sentimientos al resto de la humanidad. Que no nos deshumanicen !!!