“Más de 9000 personas han sido arrestados en USA, por reclamos contra la Policía, por causa de la muerte de George Floyd”, así reza un pequeño titular del diario QUE, de la producción y edición de los talleres gráficos del Diario El Universo de Guayaquil.
Si, bien, la represión policial, ante los excesos, fue fuerte y tratadas como, vandalismo, por la Policía, sin embargo, las siguientes manifestaciones (DEMOSTRACIONES, para los americanos), continuaron, pero de manera pacífica, sin destruir bienes inmuebles o señalética o adornos, o BANCAS en Parques y Avenidas etc.
Parecía que las manifestaciones llegaban a su fin esta semana, pero los ánimos están caldeados y se repitieron en menor grado -sin violencia-, en las 3 CIUDADES, EN DONDE LO VELARON, .
El último velatorio, en su ciudad natal, donde fue ENTERRADO. Los dos anteriores por razones de carácter RELIGIOSO y PERSONAL, EN OTRAS CIUDADES, cuyos nombres no recuerdo.
Era lo lógico, que las cosas asi terminasen, pero, un nuevo episodio se dio en este dia (Junio 5), QUE PODRÍAN REINICIAR LAS MANIFESTACIONES DE PROTESTA. Un hombre de la 3era. edad, cercano a los 80, en buenas condiciones físicas, alto y delgado, caminaba en sentido contrario, a un cordón de policías, de otra ciudad, que iban despejando aceras y calles, de una recientemente pasada demostración de protesta de ciudadanos americanos, que los iban retirando, rezago de la manifestación a favor de George Floyd y en contra del racismo.
El hombre mayor, quiso continuar caminando, y no acató, la indicación del policía de continuar caminando en el sentido contrario al que que caminaba.
El policía, lo empujo con su mano y el “viejo”, (mientras más viejos son más necios somos), cayó hacia atrás, -de espaldas- al pavimento, quedando soñado. Fue recogido por la ambulancia, con visibles muestras de sangre, que brotaban de la parte de atrás de su cabeza.
Hasta ahí, lo que sé, por haberlo visto en el noticiero televisivo de las 13H00. La reacción, de los ciudadanos de aquella ciudad se sabrá después, si el “viejo” vive o se muere. Mientras tanto permanece en Terapia Intensiva, en espera de examenes y radiografias, para una probable intervención quirúrgica.
¿Como puede ser?, me pregunté en voz alta, que a menos de una semana, de esa DEMOSTRACIÓN nacional, contra el racismo y y de una, actuación fuera de todo lugar e irazonable del policía que capturó a George, y le fracturó el cuello con la rodilla y lo mató por asfixia, otro policía, cometa esta otra “estupidez” parecida, esta vez, no contra un negro, sino en contra de un anciano blanco, de la tercera edad, y le de ese trato?
Mi hijo me respondió: “No le puede pedir a ese agente, que piense, que con su mano, podría hacer caer de espaldas a un hombre mayor y a lo mejor matarlo o causarle un daño grave”. En ese momento ese agente, simplemente actúa, cumpliendo con la orden superior, de limpiar la calle, ya no de los manifestantes, sino de los no manifestantes rezagados, o curiosos, o de quien se creyó con derecho a caminar en sentido contrario a la disposición policial y no hizo caso a la orden de retirarse.
Tarea, para los expertos en acciones policiales y en el uso progresivo de la fuerza.
Por supuesto, el policía del cuento, está suspendido de su condición de tal y quizás separado de la institución y pronto se iniciara su juzgamiento penal.
Esperemos, como se desenvolverán los acontecimientos. Los medios de comunicación colectiva nos lo comunicaran.
Tengamos fe, que la Policía norteamericana, sea más profesional o ecuánime o humana, en su reaccionar, frente a la desobediencia civil, sobre todo, que en el caso de la muerte de George y en el caso del hombre mayor, -cuyo Policía, no estaba en riesgo su vida-, de tales imperdonables y lamentables actuaciones.
Que triunfe el deber, el derecho y la justicia, y que de dichas, dos malas experiencias, ciudadanos y policías, saquen las lecciones, que los lleve a actuar de forma menos irracional, absurda y menos violenta, cómo -de lado y lado- en el caso de George, actuaron, y de ambos lados en el segundo caso referido, aunque hayan actuado, el uno con tozudez y el otro, con mucho menos violencia..
Que las lecciones aprendidas mejoren la actuación de la gente del orden y de los ciudadanos de los países del orbe.