Es necesario diferenciar y aceptar las diferencias entre libertad y libertinaje. LIBERTAD: Facultad natural que tiene el hombre de obrar de una manera o de otra, y de no obrar, por lo que es responsable de sus actos. LIBERTINAJE: Es el desenfreno en las obras o en las palabras. Qué es DESENFRENARSE: Es desmandarse, entregarse desordenadamente a los vicios y maldades.
Mucho me temo que el mundo ha llegado ya, al límite del desenfreno.
La tolerancia ha llegado a un extremo en el que se ha perdido completamente la sindéresis. Hemos dejado de pensar y nos hemos dejado llevar por la corriente, y hemos permitido que la libertad pase a convertirse en un verdadero libertinaje.
Es un atributo del ser humano la libertad, pero la estamos pervirtiendo en tal forma, que nos vamos contra nosotros mismos. Es cierto que cada uno de nosotros tenemos derecho a la libertad de expresión, a la libertad de pensar libremente, pero dentro de un contexto de respeto a nosotros mismos y a los demás. Yo tengo libertad para pensar y para obrar, pero siempre y cuando en mi accionar, haya respeto a mí mismo y a los demás. Por ejemplo simple, no tengo derecho a suicidarme, aunque sé que puedo hacerlo. Si lo hago estoy saliendo de mi libertad de obrar y pasando al libertinaje de quitarme la vida. El respeto es la base de la convivencia humana. De otra manera no sería posible vivir, ya que nos comeríamos unos a otros.
El desenfreno lleva al vandalismo y si destruimos nuestras bases morales, pasamos a ser peores que los animales. Ellos cuando menos, respetan a los de su misma especie. Nosotros, poco falta para que nos comamos unos a otros.
Hay algunos aspectos que están agravando el mundo en que vivimos: Uno es la corrupción moral, y lo que la agrava, es la desfachatez para el robo, y el gran cinismo para justificarlo. El otro es la corrupción mental. Hay gente que tiene la cabeza llena de excremento, y piensa que todo lo que hace está bien. No importa si eso me hace daño a mí mismo, o eso altera mi capacidad de pensar y me lleva a delinquir, a destruir mi propia vida, e incluso a matar.
El hedonismo, la teoría que establece el placer como fin y fundamento de la vida, es una de las formas de libertinaje, ya que antepone el placer a los principios y valores. Lo que hace humano al hombre, es el dominio de sí mismo. Dejarse llevar por los deseos, va degradando poco a poco al ser humano y lo convierte en un ser abúlico, que no se puede respetar ni a sí mismo.
Mi libertad está limitada por las libertades de los demás. Nadie tiene más derecho que otro, y el respeto debe ser la base de toda relación humana. ¡El libertinaje es el abuso de la libertad, que pasa por encima de los derechos de los demás, e impone su criterio, aplastando a los demás! Esta falta de respeto convierte a los demás en esclavos de mis ideas y es lo que va a motivar los conflictos y desavenencias, en las relaciones humanas.