El año 2020, marca un HITO, importante en el desenvolvimiento de los profesionales de la salud, Cuerpo médico, enfermeros y colabores asistenciales de los Hospitales Públicos, privados y casas asistenciales, en especial del IESS, MSP, Hospitales privados de la J.B.G, Solca, Clínicas-Hospitales Privadas y personal de apoyo y de asistencia sanitaria.
Muchos de estos superhéroes, murieron contagiados por el CORONAVIRUS, otros cayeron enfermos y felizmente se curaron. Los procedimientos y medicamentos para detener la expresión viral, se fueron realizando en el camino, ante el desconocimiento del virus y de su potencial mortalidad: “Se hizo camino al andar”.
Quedan mas heroes y superheroes por destacar: Los agricultores de Sierra, Oriente y de la Costa ecuatoriana. Ellos tampoco detuvieron sus actividades agrícolas y mantuvieron la producción alimentaria para la población ecuatoriana. También muchísimos de ellos murieron y/o se contagiaron del Virus.
Los Hospitales y Clínicas colapsaron, primero en Guayaquil, luego en Quito y en otros lugares de las principales ciudades ecuatorianas. Parece ser que los colores del semaforo regulatorio, el amarillo, es el de mayor estancia a nivel provincial, pocas lograron el color verde y muy pocas se mantineen en el color rojo.
Terminado el Estado de Excepción, por decisión de la Corte Constitucional, la nueva normalidad, es responsabilidad exclusivamente de las personas, tanto su comportamiento social como individual.
Las medidas de cuidados continúan, y continuará por largo tiempo, uso de mascarilla de manera permanente -dentro y fuera de casa- lavado permanente de manos, como mínima medida de aseo personal y el distanciamiento social, con relación a otras personas.
Los COE Cantonales, tienen la responsabilidad del manejo de las regulaciones del transporte público y de las reuniones en espacios públicos, que se van teniendo de a poco, de acuerdo con lo permitido en cada sector: Playas, parques, museos, calles de distracción masiva (Malecones), restaurantes, cementerios, transportes urbanos, intercantonales e interprovinciales, etc, continuarán bajo la regulación de los COE cantonales, en permanente coordinación con el COE Nacional. Solo discotecas y escuelas particulares y públicas, están prohibidos de “regresar” a clases presenciales, así como lugares de distracción,(discotecas), hasta segunda orden.
Los Establecimientos de Primaria, Secundaria y de Universidad, optaron por la enseñanza virtual, para evitar el contagio estudiantil, con las excepciones de colegios voluntarios, autorizados por el COE Nacional.
Quedan más héroes y superhéroes por mencionar. Las empresas nacionales e internacionales que ayudaron al Ecuador, con alimentación, equipos indispensables para atender a los infectados en el país, los donantes de alimentos y equipos de protección contra el virus y quienes personalmente los entregaron, a sus destinatarios: Funcionarios municipales y públicos, FF.AA. y PP.NN, en los sectores suburbanos y más necesitados de la población, en cada ciudad del Ecuador, con el riesgo de contagiarse, que por cierto algunos fallecieron y otros se enfermaron.
La empresa privada, ante el confinamiento y la falta de ventas colapso.
Se dictaron las medidas para su rehabilitación: la venta a domicilio.
Ventas que se realizaron casi en un 100%, a través del transporte de motocicletas. Son sus conductores, los héroes en 2 llantas, que se dirigieron de uno a otro confín de la ciudad, para entregar en el domicilio, los pedidos por teléfono tradicional o celular, con un costo adicional, por entrega, dependiendo de la distancia; un dolar, dolar y medio hasta dos dólares.
Quizás, muchos se contagiaron, otros los atropellaron, quizás alguno murió excepcionalmente, por la velocidad que imprimen en sus motos, con mucha imprudencia durante el recorrido, por llevar rápidamente, los alimentos solicitados al lugar de su destino.
Las empleadas domésticas, podríamos incluirlas entre estos, héroes por evitar contagiarse, en los transportes que utilizan para llegar a sus lugares de trabajo y no contagiar a sus patronos.
Algunas de ellas, tuvieron un tiempo, que dormir en las casas de sus patronos, por espacios de 15 días o 5 días hasta volver a la “normalidad”, de su trabajo puertas afuera, como lo hacían antes de la Pandemia.
Posiblemente, se me escapen muchísimas personas, por ejemplo, las amas de casa, que renunciaron a sus trabajos, para ayudar a sus hijos en la educación virtual, algunas renunciaron a sus empleos o fueron liquidados de acuerdo con la Ley.
Posiblemente, entre estos -heroes y superheroes- se encuentran educadores, entrenadores, consejeros, cuidadoras infantiles (niñeras), y de personas de la tercera edad, que pusieron su granito de arena, cuidando niños, adolescentes y personas de la 3era. edad.
En fin, un montón de personas -gremios incluidos- que paralizaron sus actividades normales y poco a poco se están reactivando, guardando los cuidados preventivos con sus empleados de planta, para normalizar sus actividades.
Los candidatos electorales y sus compañas -ahora virtuales- a fin de contribuir durante el periodo electoral, para evitar que sus conmilitones se contagien, a fuerza de perder electorado.
Se me escapan, los Medios de comunicación masiva; Diarios, Semanarios, Radios y Canales de Televisión, que nunca pausaron su labor informativa.
Quedan finalmente los GAD, Cantonales, Provinciales y Parroquiales.
Algunos Alcaldes y Alacdesas, se contagiaron y por fortuna se sanaron , algunos que otros fallecieron en el cumplimiento de sus funciones.
Hoy, tenemos que adicionar a los trabajadores de los Ministerios de Transporte, de Mantenimiento, de Medio Ambiente y de ayuda personal o familiar, por los daños provocados por la erupción del Volcán Sangay, cuyas toneladas de ceniza, ha afectado sembríos, ganado y otros animalitos domésticos, perjudicando seriamente a sus economías parcelarias.
Ha sido un año de calamidades, y por fortuna de héroes y de superhéroes.
Autoridades de todo nivel y ciudadanía en general, se llevan por igual el mérito de “Héroes y Superhéroes”, en el combate de este mal (virus) desconocido y altamente peligroso.
Lo “mejor está por venir”, dice un slogan publicitario. Cierto, pero, dependerá de cada ciudadano, y del acatamiento de los protocolos. De otra manera, fracasaremos en el intento.
Deberíamos vernos en el espejo de otras naciones, que no aceptan, los Protocolos, los cuidados personales, el distanciamiento y en ocasiones las cuarentenas.
Asi no mas, no adoptan las medidas preventivas, el distanciamiento y mucho menos el encierro. Están sufriendo los llamados “rebrotes”.
El “quédate en casa”, sal por asuntos indispensables y necesarios, sigue siendo, el mejor consejo y la mejor receta.
