El pasado 8 de diciembre, se presentó un proyecto de ley ante la Asamblea Nacional, impulsado por el asambleísta Esteban Torres Cobo, cuyo objeto es reformar la Ley de Fabricación, Importación, Exportación, Comercialización y Tenencia de Armas, Municiones, Explosivos y Accesorios. Entre los temas más relevantes del presente proyecto está el devolver a los ciudadanos el derecho al porte civil de armas de fuego, el cual fue restringido mediante Decreto Ejecutivo no. 749.
Está claro que con este proyecto de ley se busca combatir la evidente inseguridad que vivimos los ecuatorianos, la cual afecta nuestras actividades diarias. De manera cotidiana se pueden observar robos a mano armada y asesinatos modalidad sicariato en cada rincón de nuestro país. Los delincuentes están armados, algunos cuentan con armas de fabricación artesanal con capacidad de uno o dos proyectiles, pero la gran mayoría tienen armas con gran capacidad de 6 o hasta 10 tiros, como se puede evidenciar en las cuentas oficiales de Twitter e Instagram de la Policía Nacional.
Nos queda claro que la inseguridad está aumentando dentro de nuestra sociedad y los criminales están armados. Inmediatamente por lógica mucha gente, por no decir la mayoría, da como solución al problema permitir a los ciudadanos portar armas de fuego, sin embargo, esto inmediatamente genera varias preguntas como: ¿La sociedad ecuatoriana está lista para esta nueva ley? ¿La aprobación de esta ley no traerá más violencia? También hay quienes afirman que permitir el porte de armas ocasionará tiroteos en centros comerciales o colegios, así como el aumento de suicidios, etc.
Cabe recalcar que hace no muchos años (hasta el año 2011 para ser exactos), ya existía el derecho al porte de armas en el Ecuador, el cual estuvo presente por varias décadas, la gente tenía la opción de portar un arma, para su seguridad y la de sus allegados. En aquellos años nunca hubo esta problemática de tiroteos en centros comerciales o escuelas, que sufren otros países.
Con respecto a las muertes violentas, crímenes pasionales y suicidios perpetrados con armas de fuego, son problemas que el Ecuador sufre todas las semanas, se lo evidencia en las noticias y redes sociales. Estos crímenes están presentes en el Ecuador, aún con la prohibición de portar armas, no se han remediado; incluso han empeorado en ciertos casos, lo que si podemos solucionar y como la historia lo ha demostrado es que, con un porte de armas debidamente motivado y regulado, la inseguridad que vivimos los ecuatorianos, será reducida de forma notoria.
Haciendo énfasis en la expresión “debidamente motivado y regulado”. No toda persona podrá portar un arma, como se expresa en el proyecto de ley, pues se han señalado varios requisitos como: ser mayor de edad, realizar cursos de capacitación, someterse a test psicológicos, etc. Se debe hacer hincapié, que, al momento de realizar el test psicológico por un psicólogo acreditado, se verifique con la mayor certeza, realizando las debidas experticias, que la persona sea lo suficientemente responsable para tener, portar y resguardar un arma.
La mayoría de los ecuatorianos, somos gente trabajadora, honesta, que vela por el bienestar de sus seres queridos y allegados; no obstante, nos encontramos en una desventaja frente a los delincuentes armados, los cuales se sienten más seguro al momento de delinquir sabiendo que su víctima está desarmada. Asimismo, reconocemos las labores de nuestras fuerzas públicas, pero hay que recordar que en la mayoría de los casos cuando nuestra vida está en peligro, los segundos cuentan y la policía está a minutos de llegar. Tal vez nunca se necesite hacer uso de un arma de fuego, pero es preferible tener algo y no necesitarlo, que necesitar algo y no tenerlo. Como señala Wayne LaPierre: “Lo único que detiene a un maleante armado, es una buena persona armada”.
Y me permito añadir:
Para que la respuesta sea proporcional, el arma no debe ser de inferior en calibre y características que las que usan los delincuentes, éstos últimos sin control alguno.
Concuerdo, los ecuatorianos necesitamos medios para protegernos ante tanto deliencuente armado.
Excelente artículo.
Muy buen artículo; ojalá, quienes toman las decisiones, lo leyeran.
Concuerdo totalmente! El hecho que se apruebe una ley que permita el porte de armas por parte de la sociedad civil no significa que todos los ciudadanos tendrán armas en primer lugar, pues el procedimiento por el que deberán pasar para medir su capacidad es lo que lo definirá. La delincuencia en Ecuador día a día aumenta y el porte de armas por los civiles que no se dedican al cometimiento de actos delictivos no debería ni será una causal para el incremento de la inseguridad; por el contrario, aumentará la seguridad en las familias de tener un medio de protección en caso de peligro inminente.
Felicitaciones Robertito, muy buen artículo!!!
¡Excelente! totalmente de acuerdo.
En la sociedad actual y más en nuestra realidad como país, debemos tener la posibilidad de defendernos del mismo modo que nos ataquen. Concuerdo con las palabras del Ab Bitar. Una nacion reprimida en la delincuencia y el deshonor, es una nación sin sentido.
Excelente artículo, la frase de: Wayne LaPierre: “Lo único que detiene a un maleante armado, es una buena persona armada”. Está perfecta!! El mensaje es súper claro, muchas felicitaciones.
Excelente artículo con muy buena información!!
Concuerdo con todo lo expresado, pero para aprobar una ley que permita el porte de armas se necesita una votación mayoritaria. No nos olvidemos que los SSXXI fueron los artífices del incondicional APOYO A LA DELINCUENCIA al legislar prohibiendo el porte de armas. Recuerdo el caso de unos agricultores que iban a cosechar cacao. Llegaron los soldados y les quitaron los machetes…….!!!! Había que desarmarles.
«SI VIS PACEM PARA BELLUM» debemos exigir a la Asamblea que legislen para el porte de armas y el soporte legal que permita al ciudadano defender a su familia y bienes sin tener la preocupación de ir a la cárcel en situaciones evidentes (cuando delincuentes allanan su vivienda) o defender su libertad en un juicio si tuvo que defender su vida y la de los suyos en la calle, con leyes que defiendan al ciudadano frente a un sicario (vendetas personales ya son otro caso). Un ladrón/hampón no la tendrá fácil desde el punto de vista psicológico y práctico cuando quiera actuar contra un ciudadano si no sabe si este porta un arma o no, a diferencia de los tiempos actuales en que saben que no corren riesgos.
Actualmente el único que puede defenderse contra un delincuente armado es otro delincuente armado, así son las cosas en Ecuador, todo gracias a ya sabemos que delincuente.
Ojalá.
Yo deje de viajar por las carreteras del país y hacer turismo interno debido a la indefensión en que estamos obligados a vivir.
Yo imagino que el escritor y su acaudalada familia deben ser fanáticos de viajar a USA y de las leyes yanquis ridículas como la 2da enmienda. Asumo esto porque sería la única forma de explicar la razón de existir de este increíble artículo. No sin antes que papito sacara la billetera para pagar al diario para publicar esto, por algún capricho de esos que tienen las personas de absurda fortuna como usted.
No hay que ser muy brillantes para saber que aqui no es buena idea armar a cualquier ciudadano. Nuestra sociedad es ignorante, impulsiva, imaginen un macho guayaco con una glock en la guantera; y aun asi no es como si una glock fuera barata. Que las personas en las calles puedan activamente defenderse de asaltantes solo ocasionará balas perdidas volando por ahi.
Si, que alguien tenga un arma en su casa suena como buena idea, pero cuanto faltaria para que ocurra un accidente con el niño de la casa, o mas probable aún: un indicente en una pelea de papá y mamá. No me vengan con que se examinará a los individuos psicologicamente, las mentes son tan casi tan volatiles como las balas.
¿Por qué no hablar de cambiar las leyes a favor de los policias? De hacer mas operativos para dar con los lugares donde se fabrican estas armas artesanales. De mejorar los servicios de salud, sobre todo en programas de ayuda psicologica. Yo he tratado de conseguir una cita en esos programas municipales de ayuda, como esperaba, no he encontré nada.
Cierren las fronteras si les parece, ¿en serio son las armas la solución?
Me encanta esta parte: «en la mayoría de los casos cuando nuestra vida está en peligro»,
Perdoneme, pero yo no creo que alguien del linaje Bitar haya alguna vez puesto el pie en zonas calientes de Gye.
Pero quien sabe.
«Un Ecuador armado»
Hay que tener coraje
Felicitaciones por el artículo, el tema de la inseguridad se ha deteriorada totalmente, con las políticas robolucionarias de hace 14 años.
1) Toda la vida, cualquier ecuatoriano podía disponer de un arma en su hacienda para la caza y en su defensa, o en su domicilio para ahuyentar a los ladrones.
2) El dictador Correa, siguiendo las políticas socio-comunistas mundiales, engañando y en nombre de una paz mentirosa, desarmó a los ecuatorianos. Y escondió su real propósito, evitar que, en un momento dado, un Pueblo con armas aunque sean artesanales; se levante contra su dictadura. Persiguió y eliminó a los fabricantes artesanales que lo hacían como sustento de toda la vida para sus familias.
3) Y ocurrió todo lo contrario, más violencia de la delincuencia ante un Pueblo desarmado y lo peor, hicieron leyes para proteger a la delincuencia y no a las víctimas trabajadoras, honestas e indefensas. Política socio-comunista para tener atemorizado a los ciudadanos e incluso, cuando lo requieren utilizan a la delincuencia para silenciar opositores con la careta de robo. Casi todo asaltante dispone de un arma de fuego y no son sancionados por su tenencia. Sin embargo, si encuentran a un ciudadano honesto con un arma, lo encarcelan por varios años.
4) Y si la misma Policía está casi prohibida en utilizar sus armas, porque son acusados y encarcelados cumpliendo el sagrado deber de defender a los ciudadanos, ¿qué va a ocurrir con un simple ciudadano con permiso para supuestamente usarla en caso de ser necesario?
5) En los EE.UU., engañando y poniendo como disculpa los tiroteos en escuelas y lugares públicos, quieren prohibir el porte de armas, para silenciar a los ciudadanos y no las usen contra la tiranía disfrazada de democracia, aunque su uso esté consagrado de forma constitucional. Venezuela es el país más violento del mundo, sin necesidad de una guerra, son los frutos nefastos del Socialismo del Siglo XXI. Atentamente, Juan Carlos Cobo R.
Excelente artículo, si la ley reconoce la legítima defensa se debe permitir también la tenencia de armas para poder aplicarla.