¿Defensa del delito?

Me preocupan las actitudes de los medios de comunicación que, al parecer, defienden al que actúa mal, al que delinque.

Es indudable que no se debe difamar al inocente, pero en muchas ocasiones, con fallas de diverso tipo, se trata de ocultar la ineficiencia o el error de una Institución que comete un error o un delito. La responsabilidad de las Instituciones es su carta de presentación ante la sociedad y es obligación de las Instituciones salvaguardar su buen nombre por medio de actuaciones correctas, no porque le tapan los errores o se generalicen.

Me molestó una carta a un diario que denuncia un robo en una Institución bancaria, a un cliente al que le robaron dinero de una cuenta de ahorros, sacándole dinero de la cuenta, por 2 ocasiones con papeletas de retiro con una firma diferente a la del cuenta ahorrista.

Yo comprendo que es tedioso revisar las papeletas de depósito o retiro de una cuenta, pero esa es la obligación del Banco y debe hacerla en cada transacción.

El Banco que no cumple con su deber, debe ser reportado a la ciudadanía, para que puedan saber que ese Banco no cumple con sus obligaciones y es preferible usar una Institución bancaria más seria para cuidar su dinero.

Creo que la obligación de los medios de comunicación, es con la ciudadanía, no con los delincuentes. En el caso que comento, creo que los Bancos tienen la obligación de vigilar a su personal.

Otro punto que preocupa, es la forma como se pone las noticias desde la fatídica robolución: ahora ponen, fueron apresados José G., Armando R. y Sutano B., o dicen capturaron in fraganti a Melisa V. y a Juan N. En tal ilícito, Es decir, no se pone quien es el delincuente. No deseo que se culpe a nadie sin pruebas, ni que se los condene. El diario no está diciendo que ellos son los culpables ni los ladrones, paro si se los capturó, creo necesario que se sepa, y el medio de comunicación está dando la información correcta. El querer ocultar al asesino o al delincuente, es propio de los asesinos y ladrones. Indudablemente, al fatídico gran capo, le interesaba que no se culpe a nadie, de nada. Los bomberos no se pisan las mangueras.

¡Dejemos de defender al delincuente! En la forma como se quieren dejar las cosas, es para igualar al delincuente con la gente honrada. Esa actuación timorata (o timo (de) rata), nos está llevando a tener miedo de ejercer la justicia. Ya sabemos quiénes son los delincuentes, apresémoslos y metámoslos a la cárcel, y permitamos que la gente se pueda dar cuenta de quién es honrado y quién no.