¡La lucha contra la corrupción es dura! ¿Qué la hace que sea dura? Nadie quiere enfrentar a los mafiosos. Se cubren entre ellos y se defienden por la vía que sea.
Me molestó muchísimo conocer que cuando hay alguien a quien se le demuestra o se le descubre robando, delinquiendo o traficando puestos en el Gobierno, enseguida se trata de protegerlo.
He hablado con dos amigos, y de diferentes grupos, a quienes les han pedido, por dos vías diferentes que inviertan en algo seguro. Si tú pones X cantidad de dinero, te devolvemos el doble en poco tiempo. Lo necesitamos para comprar asambleístas para que voten ¡NO! en la censura a Bella, ¡ya que si ella mantiene su curul, podemos seguir metiendo gente nuestra a laborar en el Gobierno!
El sistema es sencillo y seguro y en el caso (prácticamente imposible) de que llegara a fallar, te aseguramos que conseguimos otro. No hay posibilidad de falla. Tú dinero está asegurado.
La corrupción llegó a los más altos escalones de la burocracia. Casi todos los de elección popular, tienen precio, consideran que no están cometiendo un ilícito, sino sacando partido de “amistades”.
Me encantó escuchar la entrevista de Alfonso Espinoza de los Monteros, a nuestro Presidente, por los 100 días de gobierno, pero la lucha que tiene que librar incluso internamente, indica las dificultades que tiene que enfrentar.
Espero que la corrupción pueda ser eliminada, pero me temo que es una lucha como la de David contra Goliat.