Creo que no hay mejor nombre que el de partidos políticos. Como su nombre lo indica, tienen al país partido. Quizás mejor nombre sería podridos, porque reflejaría lo que son, pero se herirían susceptibilidades y no aceptarían. Además hay algunas personas que sí son decentes.
Por eso, ya se oyen algunas voces que hablan de no llamarse partidos sino movimientos, alianzas, agrupaciones, o cualquier otro nombre.
En todo caso, si se habla de ideologías, es absurdo decir que hay 20 ideologías diferentes, y peor 300 como tenemos partidos políticos, en Ecuador.
Lo que son es líderes prepotentes, que porque tienen algunos seguidores, se sienten con derecho a fundar un partido, o movimiento, o como quieran llamarlo.
Este tipo de arrogancia, creo que debe ser eliminada. Además, es absurdo hablar de partidos, movimientos o lo que sea, con menos del 5% de la votación nacional, y lo recalco, porque los votos nulos, o los votos en blanco, les ganan, porque cada uno obtiene más del 10% de los votos, o sea más del doble de lo que consiguen ellos.
Si fuéramos un país racional, no deberían haber (porque no hay), más de 4 o 5 partidos políticos reales, por su tendencia política. En Ecuador, seguimos votando por personas, no por ideologías.
Debería haber elecciones primarias, para definir candidatos por ideologías, no las elecciones mamarracho que tenemos en Latinoamérica. ¡Miren lo que ocurrió en Perú! “Cuando veas la barba de tu vecino, rasurar, pon la tuya a remojar”.
En realidad, lo de los partidos políticos es una forma más de robar al Estado, porque el Gobierno le da a cada agrupación que pone candidatos, dinero para las campañas. Por otro lado, si se pide que cada partido pida a sus partidarios (que algunos lo hacen), lo que se logra es que el que pone, tiene que recuperar lo puesto. Si nos quedamos con dos o máximo cuatro candidatos, el Estado ahorraría mucho dinero de campañas. Los candidatos no gastan todo y salen beneficiados sólo por ser candidatos