El problema del subsidio es ¿a quién beneficia el subsidio? Por las noticias de prensa, los ecuatorianos estamos subsidiando a los vagos e incompetentes del Gobierno, o de Petroecuador, que nos obligan a destruir los automotores, vendiéndonos combustibles de pésima calidad, según ellos subsidiando al público.
La realidad, de acuerdo con la prensa, es que recibimos gasolina de pésima calidad a un precio más bajo que el de mercado de la gasolina de buena calidad ¡que NO SE VENDE AQUÍ EN EL PAÍS! (es decir, la venden a precio real del buen combustible, y ellos son los subsidiados), la gasolina y el diésel que se venden en Ecuador, son subsidiados, de acuerdo con el Gobierno, porque paga a Petroecuador, son un combustible malo, el precio al que se vende internacionalmente, combustibles de buen octanaje y calidad, compensando lo que pierde por su ineficiencia, al no poder alcanzar el octanaje requerido. Los ecuatorianos pagamos, al cubrirse el subsidio, el mal trabajo de Petroecuador, y aparte pagamos en repuestos para nuestros vehículos por los daños al motor, por usar combustible de mala calidad.
¿No somos capaces de mejorar la calidad de nuestros combustibles? ¿Nos gusta la mediocridad? ¿Estamos felices de regalarle la plata a los que trabajan mal?
¡Cambiemos la mentalidad! ¡Produzcamos combustibles de calidad! ¿No somos capaces? Si lo hacemos, no subsidiemos los combustibles. Cobremos lo justo, pero importemos combustibles buenos, permitamos la subida del pasaje, y comencemos el aumento de salarios prometido en campaña, para compensar la subida del pasaje.