21 noviembre, 2024

¡El mundo creyente y libre es el culpable! 

Al entregarse al “NOM-CT” que vicia la democracia y sus instituciones, delincuencia y narcotráfico que silencia y atemoriza, Biden abre la frontera y quita presupuesto a la Policía.

Un general alemán advirtió del riesgo ruso y lo sacaron, O. Jarrin parecía Ministro de Defensa de China, Lasso avala el petróleo y deuda china y mutiladora e ilegal Convemar de “Correa”, devastadora de las Galápagos y mares.

El mundo enriquece a China – renunciando a sus industrias – “¿por la avaricia de más dinero con su mano de obra casi esclava”? Guardando las distancias, Putin es Y. Brynner (Ramsés), pero mucho más cruel y peligroso, y Zelenski es Ch. Heston (Moisés), judío que defiende a su país que quiere vivir en libertad – ojalá tuviese la ayuda divina como Moisés – La URSS colapsó en 1990-1991 (15 repúblicas), en dominó por la caída del “Muro de Berlín en 1989”.

El capitalismo llegó a Rusia, manteniendo “el poder de partido único – igual que China con el PCCH” – Varias repúblicas eligieron a Europa y la OTAN. Otras, con títeres de Rusia y elecciones que lavan la cara a déspotas “con sufragios amarrados, fórmula para tomarse las endebles democracias del mundo”.

Putin invade con máxima violencia, ¿ejemplo silenciador para propios y extraños? Biden prometió ayuda rápida y no cumplió y el mundo los abandonó ¿cómo ocurrirá con Taiwán y otros? Ucrania rica e invadida por siglos, con títeres “desmanteló unas 5 mil ojivas nucleares, gran parte dadas al Goliat ruso”. “Memorando de Budapest-1994” con respeto a su soberanía y defensa de EE.UU., UE y ONU. ¡Luego, la alemana A. Feldhusen declaró que no era vinculante, que no valía! ¡Sí, las bombas atómicas!

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Ciudad Aterrada

Es harto evidente en los resultados que, las medidas tomadas para reducir los delitos no son las mejores ni las más eficientes para reducir la inseguridad y el miedo en nuestra Ciudad.

No permite sorpresa que un asunto tan importante, tan esencial para la convivencia urbana, tan presente en los escenarios políticos, administrativos, medios de comunicación y en el diario vivir, se maneje como objeto inútil para fomentar la seguridad y la demanda de acciones que contribuyan a la tranquilidad ciudadana. La percepción, desde afuera, indica que, al usar los mismos controles y sistemas de siempre, se alejan de una visión global ajustada al accionar de los actores urbanos.

La inseguridad es una preocupación constante. La seguridad es una política de estado y un mandato constitucional. La tranquilidad ciudadana es un derecho irrenunciable e irrevocable.

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