Justamente, entre los libros que me ha tocado releer en los momentos de ostracismo que hemos vivido por el Corona-Virus, me he encontrado con algunas ideas que vale reprisarlas y hacer conciencia por la tragedia que vivió el Ecuador en junio pasado.
Por lo cual, me permito trascribirlas “Desde mi trinchera”, con un llamado a reflexionarlas y, sobre todo, a tomar conciencia socio-política, por el bien de nuestra Patria, que necesita acción positiva mancomunada de todos los ecuatorianos, desde el hombre de poncho y sombrero de fieltro, al de saco y corbata:
Del libro Homos Deus de Yuval Noah Harari :
“El terrorismo es una estrategia de debilidad que adoptan aquellos que carecen de acceso al poder real…
¿Cómo es posible, pues, que los terroristas consigan copar los titulares y también la situación política en el mundo?…
Los terroristas organizan un espectáculo de violencia pavorosa, que capta nuestra imaginación y hace como si retrocediéramos al caos medioeval…
En consecuencia, los estados suelen sentirse obligados a reaccionar frente al teatro del terrorismo con un espectáculo de seguridad y orquestan exhibiciones de fuerza… En la mayoría de los casos, esta reacción desmesurada ante el terrorismo, genera una amenaza mayor que los propios terroristas…”
Y entonces ¡Ecuatorianos todos!
Estemos atentos a no seguir cayendo en esos actos masivos de violencia que dejan malparados a sus actores.
Atentos todos, de no hacer actos como mención racista, justo cuando de los millones de habitantes unidos del país el gran escritor y maestro ecuatoriano Justino Cornejo decía “Los que no tenemos de inga, tenemos de mandinga”…
Sin ir muy lejos yo -Lily Pilataxi García. -Alguna vez en una entrevista, respecto a mi apellido, a la pregunta – ¿Cómo se define Ud.? Contesté: -Me enorgullezco de ser una mestiza ecuatoriana americana y como tal, de poseer la rusticidad mágica que me da aferrarme a la belleza telúrica y artesanal de nuestras culturas ancestrales, sean estas: Inca, Valdivia o Chorrera, por ser hija de padre serrano y madre costeña.
Detesto y me resisto a decir que tengo origen indio, porque indios nos pusieron los españoles ignorantes que iban a las Indias Orientales y azotados por una tempestad llegaron a las Antillas y creyendo estar en la India, desembarcaron y a todos los habitantes de esta región de América, los llamaron indios: desde el norte a la Patagonia…
Por la paz del mundo
Excelente!