En estos instantes que Gloria Gallardo Zavala está viviendo un momento crucial en su vida pública; me permito publicar algo que escribí en marzo del 2000, con vigencia en todos los tiempos, como señal de lo que significó y significa la vida de una mujer incomparable que marcó hitos en la historia de Guayaquil….
Lily Pilataxi de Arenas
Homenaje a Gloria Gallardo Zavala
de UNME- Unión Nacional de la Mujer del Ecuador
11 de marzo de 2000
Valga el momento para que las mujeres hagamos un alto para reconocer a nuestras congéneres que han marcado hitos en la historia de la humanidad en este siglo, entre ellas: Md. Curie, Golda Mayer, Indirah Gandy Gabriela Mistral, Madre Teresa de Calcuta. Eleanor Rooswel, Margaret Tacher, Rigoberta Menchú y, tantas más, hasta llegar a nuestra Patria el Ecuador, donde han vivido mujeres paradigmas de trabajo y tesón que han marcado hitos en la historia de los derechos de la mujer.
Grande es la lista, que la encabeza: Matilde Hidalgo de Procel como la primera mujer que reclamó el derecho al voto, dándole el sitial a Ecuador, de ser el primer país en América de concedérselo.
De ahí, mujeres como Zoila Ugarte de Landívar, Ma. Angélica Idrovo, Nela Martínez, Dolores Cacuango, Enma Esperanza Ortiz, Isabel Herrería, Irene Paredes, Anunziata Valdez que tiene una página de oro con su trabajo jurídico en los códigos de leyes a favor de la mujer ecuatoriana; Kety Romoleroux, Mercedes de Vega, Fabiola Cuvi, Italia Baquerizo de Pashley, Katya Murrieta, Jenny estrada, etc., etc.
UNME como organismo femenino, en pie de lucha por la reivindicación de la mujer tiene el deber de reconocer la valía de todas esas mujeres y las que siguen engrosando la lista, como excepcionales por su trabajo y entrega a las causas nobles de la Patria ecuatoriana.
Por eso esta mañana en que se rinde culto a la mujer universal, rinde homenaje a Gloria Gallardo Zavala: mujer ecuatoriana, guayaquileña, en plena actividad, a la que hoy por hoy, esta ciudad le debe mucho en su era reivindicadora.
Ella es el símbolo en este momento del civismo guayaquileño.
Mujer excepcional de un temple y constancia sin igual y, lo que es más, de una gran pasión cívica-creadora.
La historia de Guayaquil tiene páginas deslumbrantes de honor y transformaciones que han marcado hondas huellas en la vida ecuatoriana.
Entre esos episodios hay que anotar el sucedido desde 1992 a nuestros días -en Guayaquil- La redención de la ciudad por el Alcalde León Febres-Cordero- y es aquí donde Gloria Gallardo Zavala juega un papel vital y preponderante.
Mujer destacada en el campo periodístico de lucha, puso su contingente liderando un equipo de acción cívica al servicio de la Alcaldía de Guayaquil, en el titánico salvataje del civismo guayaquileño, para devolverle la dignidad perdida al ciudadano de esta urbe.
El Alcalde acogió su ideal porque sabía que ninguna obra por gigante que sea, alcanza el valor si el pueblo no la recibe con orgullo en deber de preservarla y apreciarla en toda su dimensión.
Es largo pormenorizar a los presentes, el arduo trabajo de Gloria Gallardo Zavala y su equipo, menos aún a los que estamos aquí rindiéndole homenaje, justo porque sabemos de su trayectoria:
Pero los programas salidos de su directriz creadora y dinámica han hecho que el guayaquileño ame sus calles, sus monumentos, sus parques y sus plazas y, sobre todo, consciente de que, como miembro de una comunidad, necesita de su acción para que la inmensa obra material que desarrolla esta Alcaldía, perdure. Ahí los comités barriales comprometidos con la movilización cívica que, cual huracán, levanta el espíritu en barrios y ciudadelas guayaquileñas.
Vale también mencionar a Gloria Gallardo Zavala en su acción como Legisladora, nombrada por elección popular y democrática: un miembro más para reestructurar la Constitución ecuatoriana, donde también se destaca por su responsabilidad patria, tesón de trabajo y visión democrática-política, evidenciando la capacidad de la mujer ecuatoriana, a gobernar.
Y después de esa jornada, otra vez a su Guayaquil, a seguir programando festivales educativos-culturales, a las famosas mingas de barrer calles, sembrar parques etc., etc.
Así continúa su trabajo que, no podrá opacarse nunca. A más que la historia ya la recogió entre las mujeres ilustres de Guayaquil y la Patria, que junto a los varones que también la han engrandecido, comparten sus lauros.
Cumpliéndose así los ideales de quienes luchamos aquí y en los foros internacionales, por la igualdad de los derechos de la mujer y el varón: con la esperanza, a que en este año 2000, las barreras segregacionistas vayan cayendo para siempre y marchemos juntos los dos géneros, para llevar al mundo hacia adelante.
Por la paz del mundo
Me adhiero al homenaje a una gran dama, Gloria Gallardo Zavala. Como guayaquileña le agradezco la promoción que siempre hizo de nuestra ciudad. Fue honesta, creativa y proactiva.