En muchas ocasiones hemos escuchado que las palabras construyen o destruyen y si bien es cierto, esto lo podemos observar en la sensación que sentimos en nuestro cuerpo, cuando permitimos que eso que escuchamos o que nos decimos a nosotros mismos afecten nuestras emociones. No es lo mismo escuchar palabras que nos inspiren, como por ejemplo, lo estas haciendo bien, te vez excelente, puedes lograr eso y más. Estas palabras hacen que nos sintamos seguros, nos suben el autoestima, sientes que estas haciendo las cosas desde tu poder, pero si por el contrario escuchamos palabras como, no vas a poder, no tienes la capacidad de hacerlo, estas demasiado flaco o demasiado gordo, estas palabras hacen que sintamos emociones que nos debilitan, que nos sintamos pequeños, es como que nos desconectan de nuestro poder y nos quitan energía.
Aquí podemos elegir a que le damos poder, si a sentirnos afectados o debilitados por lo que otros nos dicen o si estas palabras las utilizamos como escalón para llevarnos a nuestro poder. Debemos tener presente que esas palabras pueden ser un reflejo de lo que la otra persona esta viendo en nosotros, que no está viendo en él.
Como mencione anteriormente, las palabras tienen poder, si salimos a la calle y hablamos de todo lo que no funciona para nosotros, por ejemplo, el trabajo esta duro de conseguir, la situación está difícil, mi jefe me trata mal, esa es la energía que estamos llamando hacia nosotros, porque donde ponemos nuestra atención ponemos nuestra energía.
La palabra es la gran herramienta que vive intrínseca en nosotros, conquistar su magia es una virtud.
Debemos estar atentos a las palabras que decimos, pues ellas reducen la realidad a algo tangible para la mente humana, lo cual limita la imaginación y las posibilidades.
El propósito es que aprendamos a utilizar nuestro lenguaje y a observarlo para que encontremos la apertura para evolucionar y conquistar nuestros anhelos.
Vivimos a través del lenguaje, si lo pudiéramos ver de manera objetiva, descubriríamos los mundos que abre y que cierra.
El lenguaje permite crear maneras para construirnos como seres humanos y para relacionarnos con lo que nos rodea.
Cada palabra tiene una carga energética de tal magnitud, que, si no estamos atentos a dichas características, no podremos utilizarlas como la herramienta más poderosa.
Miguel Ruiz dice en su libro Los Cuatro Acuerdos ¨ Se impecable con tus palabras y vivirás el cielo en la tierra¨
Si eliminamos de nuestro lenguaje palabras como: Nunca, siempre, voy a tratar, él tiene la culpa, tu eres mi problema, las cosas deberían ser diferentes. Estas palabras son moduladores que limitan lo que es posible y con ellas llegamos a conclusiones sobre como es la realidad y nos quitan nuestro poder de encontrar caminos diferentes de ver la vida.
Si modificamos nuestro lenguaje de una manera positiva y somos observadores de su uso, podemos cambiar drásticamente el modo en que caminamos nuestra vida.
El lenguaje es una fuente creativa, crea nuestra realidad limitando o ampliando nuestras fronteras.
GRACIAS POR VUESTRO ARTÍCULO QUE ES UNA MARAVILLOSA REFLEXIÓN PARA LOGRAR EL BUEN VIVIR.
Que bueno que te gusto, la idea es que tomemos conciencia de cómo es nuestro lenguaje en nuestro día a día