El Estado ecuatoriano ha perdido el control de la delincuencia
No hay lugar donde la gente se sienta segura, porque la violencia ha alcanzado todos los puntos cardinales, y todos los sectores sociales.
En los barrios más pobres, en los sectores medios y en las urbanizaciones exclusivas; en la ciudad y en la zona rural; en la Costa, en la Sierra, en la Amazonía y hasta en las Galápagos, la violencia es el pan de cada día
¡Esto no puede seguir así !
Las tres jóvenes de Santo Domingo de los Shàchilas asesinadas y enterradas en Quinindè y con una supuesta investigación hasta las últimas consecuencias que de seguro es la impunidad
Días atrás, el secuestro de una pareja en la Ruta Viva conmocionó a la Quito; felizmente, la rápida y efectiva acción de la Unidad Antisecuestros y Extorsión (Únase), por la oportuna denuncia, logró rescatarlos sanos y salvos.
El doloroso episodio sacó a la luz una realidad espeluznante: Un menor de 13 años era uno de los secuestradores y tenía antecedentes por homicidio.
Ser pobres y sin posibilidades de educación, creciendo en un medio hostil y abandonados por el Estado, convierte a los niños en presa fácil de las organizaciones delictivas.
Expertos revelan que en 2022 alrededor de 200.000 niños habrían desertado del sistema escolar público. ¿A dónde irán? ¿Qué harán con su vida si las mafias son las únicas que les ofrecen ‘una oportunidad’?
El secuestro mencionado también mostró la realidad insospechada de la capital en materia de seguridad, en algunas de las vías más transitadas. En la Ruta Viva se producen con frecuencia asaltos, secuestros y hasta asesinatos; mientras que en la avenida Simón Bolívar y en la autopista General Rumiñahui hay varios puntos críticos.
En fin que nos hace falta para parar la delincuencia a más del endurecimiento de penas a menores y a delincuentes que reclutan a menores de edad
En mi criterio lo que hace falta es políticas publicas integrales y en especial las siguientes
1. Política criminal o criminológica: Es decir la acción planeada integral de procedimientos preventivos y represivos contra el crimen. Como cualquier política, es comandada por un discurso orientado que propone un conjunto de estrategias o procedimientos por medio de los cuales, el Estado y la sociedad organizan sus respuestas al problema de la criminalidad.
Representa la aplicación de los conocimientos criminológicos para prevenir y controlar las conductas antisociales. Atiende desde la prevención del delito hasta la reincorporación del ex reo a la vida en sociedad.
Constituye un análisis crítico de los sistemas de poder punitivo y control social, para determinar si es adecuada la respuesta estatal al prevenir y reprimir la criminalidad
En resumen, la política criminal es la ciencia o arte de los medios, de los que se sirve el Estado para prevenir y reprimir los delitos.
2. Política penitenciaria: Es una rama de las ciencias políticas y de la política criminal, que formula los fines de las instituciones destinadas a la ejecución de las penas privativas de la libertad y la mejor de sus posibilidades para el cumplimiento de tales fines.
Ella supone, asimismo, una valoración crítica de las instituciones vigentes para proponer, eventualmente, su reforma.
Y el objetivo de todos ver la dimensión del mal. Encarar a la delincuencia, al crimen organizado y a todas las mafias en Ecuador es una tarea que ameritaría la fuerza del mítico Hércules y la astucia de Perseo juntos; por eso, nadie puede dejar de participar, comenzando por la organización barrial y a las autoridades que tienen la obligación legal y moral. No podemos perder nuestro país. ¡Hay que parar la violencia! Pero no armando al pueblo. Así comenzó Colombia y terminó en las garras de las guerras de guerrillas y le narco trafico
Sirvió de base para efectuar este video un enlace a la nota original en Primicias.ec: Asaltos, robos, secuestros; ya basta: Hay que parar la violencia y 45 de mis videos en tik tok y 302 en mi canal de YouTube
Correcta su apreciación, necesitamos con urgencia leyes que arrasen con el crimen, la delincuencia, la mala fe, la viveza criolla, el robo, las vacunas y todos los delitos que se cometen a diario, diestra y siniestra.
Pero también creo que falta que en las escuelas y colegios vuelvan a enseñar ÉTICA y MORAL, como materias obligatorias, si usted pregunta a un niño o un joven su significado por lo menos, pues no saben, de ahí que se han perdido los buenos modales, el respeto y no acabaría si menciono lo que no se enseña y debemos saber para una convivencia en paz.