“Los manglares están en serio peligro. Se ha perdido un tercio de los manglares que antes existían y hoy, más de tres cuartas partes de los existentes, están amenazados y, con ellos, todos los organismos acuáticos y terrestres que dependen de ellos”, señala un informe oficial de la Unesco. Por ello, este organismo estableció el último 26 de julio, como día internacional para la defensa de los humedales de manglares y todos sus ecosistemas.
El mangle es un árbol leñoso que vive semisumergido en los estuarios que desembocan en los océanos, permite vida abundante de todas las especies, larvas, moluscos y animales acuáticos. Dan sustento y alimento a miles de personas, que viven de la explotación de estos recursos y forman parte de la primera línea de defensa natural, que tiene el planeta frente a los fenómenos marinos adversos, así como para mitigar los efectos del cambio climático.
Están amenazadas en el mundo entero, todas las zonas costeras, incluso algunos sectores más bajos de la misma ciudad de Guayaquil y la contigua isla Santay corre el riesgo de desaparecer. Es imprescindible su urgente reforestación, reponer, reforestar todos los manglares perdidos. El Club Rotario de La Puntilla ha elaborado un proyecto para reforestar 150 hectáreas en el Golfo de Guayaquil, en la zona de Balao. Estamos seguros lo podrá realizar con la ayuda y participación de varios distritos del mundo entero y fondos provenientes de La Fundación Rotaria.
La arena y sedimentos que se obtienen del dragado del Río Guayas, del islote frente a Puerto Santa Ana, debería la Prefectura utilizarlo y desviarlo para rellenar las partes y zonas bajas de la Isla Santay; para proteger y evitar perder ese santuario de vida silvestre. Esa isla debió ser escogida para Reserva Protegida y construir en su cabida el nuevo areopuerto internacional de la ciudad de Guayaquil, en vez de los terrenos de Daular. Hubiera servido como una solución mucho mas cercana para la ciudad y para todas las provincias del Austro, Centro y Sur del pais.
“Una hectárea de manglar fija cien veces más carbono que una de bosque tropical”. Protegen las costas de la erosión, el oleaje, el aumento del nivel del mar y reducen el riesgo de inundación”. Protejan el habitat de aves, moluscos, peces, crustáceos, por lo un tercio de las pesquerías dependen de su existencia. Reforestar manglares en toda la zona costera del Golfo de Guayaquil deberia ser una prioridad de todos los municipios y prefecturas del Guayas y la provincia del Oro.
Ademas, daríamos trabajo a miles de pescadores que recogen cangrejos, conchas, moluscos y la pesca de muchas especies provenientes de las zonas de manglar. Hoy en día, se ha comenzado a exportar cangrejos, conchas y muchos productos similares. Imagínense que la fama internacional alcanzada por su sabor, de los camarones ecuatorianos, se traslade a estos nuevos rubros y variedad de exportaciónes. Que en muchos restaurantes de Europa, Estados Unidos y el Asia se anuncien estos nuevos productos.
La exitosa realización del proyecto del Club Rotario La Puntilla será un valioso ejemplo digno de replicarlo en otras zonas y municipios, al igual que en otros paises costeros que tengan igual necesidad.
gracias Luis, ojalá te escuchen. Que vayan a los cayos en Florida y vean el maravilloso rescate de los manglares y sus especies que han hecho