Este mes entre Ecuador y Perú estamos en medio de la celebración de los 25 años del Acuerdo de Paz entre ambos países, pensar que aún me acuerdo de esa Guerra, pero que hoy ya realmente quedó como parte de la historia, y en general es muy fácil olvidar el pasado. En la mañana ví en redes sociales el «pronóstico de Alexa» de la fecha del inicio de la Tercera Guerra Mundial (más falso que tu ex) y es inevitable pensar que en el mundo hay suficientes bombas nucleares para el Apocalipsis y desaparecernos a todos. Sin embargo, sigo confiando, y creyendo, que a pesar que estamos en estado constante de Guerra y Conflictos, el mundo quiere Paz.
Hace más de 10 años, estuve de vacaciones en Croacia y mi paso por esa región me llevó a transitar entre Serbia y Bosnia & Herzegovina, donde se realizó una de las guerras más sangrientas del siglo XX. Aparte de todos los documentales que ví al respecto, estar ahí fue otra sensación, y no fue nada agradable ver edificios enteros destruidos por misiles, los recuerdos de bombardeos en las paredes y calles, placas conmemorativas donde hubo alguna masacre, o canchas de fútbol enteras convertidas en cementerios, «los niños son los que más mueren en las Guerras porque no los puedes retener en casa todo el día, salen a jugar», me quedó grabado el relato de una madre que perdió a su hijo en un ataque.
La historia de la Humanidad está escrita sobre sangre derramada, y desde los inicios de los tiempos ha sido así. Hemos podido desarrollar la Inteligencia Artificial, y no la Inteligencia de Convivencia. En el libro de Samuel Huntington, «El choque de civilizaciones y la reconfiguración del Orden Mundial» se habla precisamente de lo complejo que es convivir para el ser humano por nuestras diferencias, el alude, principalmente culturales. De acuerdo, al Armed Conflict Survey, existen 331 conflictos armados en el mundo (esto aparte del Crimen Organizado y Delincuencia de cada país). Los más recientes conflictos mediáticos como Rusia-Ucrania, y en el Medio Oriente, son la punta del Iceberg de millones de dólares que se invierten en: pelearnos.
Si pensamos cómo solucionar la Guerra, primero simplifiquemos el concepto. Pensemos en todas aquellas personas, amistades, colegas, familiares, persona desconocida que conocemos a diario (y que conducen terrible) y pensemos en posibles escenarios de conflictos que pudiesen existir a diario. Ahora de manera más extrema, recordemos aquellas personas que consideramos un «enemigo» , alguien con quien se tuvo un desencuentro tan grande que no se puede «hacer las paces» o incluso aquellos del «otro bando político» o del «otro equipo de fútbol». Ahora esa misma sensación de simplemente no poder «llegar a un acuerdo o las paces» lo podemos traspasar a países enteros, y miles de millones de personas discutiendo por territorio, religión, recursos, economía, geopolítica cultura y demás, y sí, así de complejo es solucionar los conflictos del mundo.
¿Queremos paz en el mundo? Primero hagamos las paces con nosotros mismos, con nuestros allegados, con nuestros enemigos, con los que » no nos caen» , ¿y si no se puede? Pues ahí tenemos la respuesta. No es fácil. La mayoría de las veces se va a requerir un intermediario o tercera persona que intervenga, en algunos casos entre individuos, eso se traduce a un litigio legal, donde se «llegan a acuerdos» impuestos por un juez imparcial. Hasta los animales se matan entre ellos, peleando por recursos y territorios. Sin embargo, el Ser Humano pensante tiene una ventaja sobre los animales, tenemos consciencia y somos pensantes.
Como una vez me dijo un amigo, «todo el mundo quiere ir al Cielo pero nadie quiere morir», y de igual forma, el mundo quiere parar la Guerra, pero los seres humanos no generamos Paz. No alimentamos esa convivencia, lamentablemente, no es fácil, requiere esfuerzo, madurez, ceder, negociar, llegar a un acuerdo. Si queremos resolver las Guerras y Conflictos armados en el Mundo, comencemos resolviendo nuestras Guerras internas, y cercanas a casa. No exijamos al mundo lo que nosotros tampoco podemos dar.
Ahora tengo otra teoría. A veces el conflicto también es necesario, tener diferencias y pelear es necesario, a veces uno puede genuinamente querer paz, pero frente a una injusticia ya sea personal o ajena, se justifica un conflicto (por lo general aquí es cuando se entra a contratar a un abogado o pedir un intermediario). Sin embargo, una vez que termina el conflicto o «pelea», no hay nada más agradable que esa sensación de Paz.
Hace algunas décadas se crearon las instituciones internacionales como Naciones Unidas y los Cascos Azules para ser los intermediarios del Mundo, lamentablemente pienso que perdieron el norte, ya no se enfocan en promover la Paz pero ahora generan más divisiones. Necesitamos más personas que aboguen por la Paz, que la gente con Poder e Influencia abogue como intermediarios, que los empresarios como Elon Musk y allegados intervengan y presionen a los poderes Políticos y organismos internacionales, y que a pesar que no encontraremos una solución perfecta, logremos realmente la Paz.
