Cada día que transcurre , prendes la televisión o escuchas los noticieros de los mismos periodistas que se creen más importantes que la noticia y a los mismos entrevistados causantes de las crisis, nos hacen pensar que existe una falta total de respeto ,pero lo más grave en algunas personas; aun siendo aquellas de diferentes niveles de intelectualidad y posición social y económica, existe, una suerte de desdén emocional y conformismo y nos vamos acostumbrando con cualquier gobierno y en un gran porcentaje de ecuatorianos hasta cierto punto, observo conductas entreguistas frente al voluminoso efecto que aquello genera el ecuatoriano con escasa cultura política electoral.
Pertenezco, orgullosamente, a la generación de los 40 y 50 (Cuento ya con 75 años de vida), la mitad con servicios en el sector público y la otra mitad en el libre ejercicio profesional del derecho, combinando con los gajes de un escritor frustrado y aislado por carecer de membresía política.
Y no quiero decir con esto que las personas de mi generación siguen siendo mejores que las subsiguientes; seguro que no.
Hoy con la abundancia de la información y la tecnología, existen profesionales con más conocimientos e información, pero con poca práctica y calidad moral en lo que hacen.
En dicha época también se observaban excesos y malas prácticas de conducta, existía también actos de corrupción, pero las relaciones entre personas eran diferentes.
Bueno, es que la esencia de aquello se debió a la consecuencia de la disciplina de nuestros padres en la formación de cada uno de nosotros, el respeto a la autoridad. Indiscutiblemente, el respeto, fue siempre la piedra fundamental de dichas conductas.
“El respeto es como un boleto de ida y vuelta… Hoy solo veo personas y personajes solo con boleto de ida y proliferan las ratas, rateros y ratones en todos lo ordenes de la vida.
Entonces, ¿qué cambio en nuestra estructura interna?
Lógicamente, cambiaron los valores, en la educación, por ejemplo, no nos sirve de mucho la inteligencia artificial, actuamos por emociones y la respuesta es que las estructuras del individuo; como parte fundamental de toda sociedad, psicológicamente y moralmente formada, antes era respetuosa, buena, honesta, pujante, sensible, solidaria, creativa, etcétera, y estaban basadas en valores y principios, jamás susceptibles de quebrantarlos.
En mi época había respeto a la ley, al orden, a la disciplina, hoy esos valores están suplantados por la viveza criolla, regidos por la ley del más fuerte, por el consumismo, nos encanta los puentes, los feriados y la parranda y elegimos a gobernantes de borrador y pantalla en redes sociales.
Personalmente, la vida me ha demostrado que las personas que nos frustramos aún tenemos una misión por cumplir, comprendiendo la circunstancias del entorno en que se vive para aliviar la situación del país o familiar por más critica que parezca Y cuando quieras ayudar a alguien hazlo de corazón, sin esperar nada a cambio, sin forzar las circunstancias y sin mirar el pasado.
En el universo, la energía y la masa están intrínsecamente relacionadas. Según la ecuación de Einstein = 2, la energía de un sistema es igual a su masa multiplicada por el cuadrado de la velocidad de la luz. Esto sugiere que la masa puede considerarse una forma condensada de energía. La velocidad de la luz no solo es el límite de velocidad universal, sino que también juega un papel crucial en esta relación. En el contexto del espacio-tiempo, la masa y la energía afectan la curvatura del espacio y del tiempo, influyendo en el comportamiento de los objetos y las señales en el universo.»