Dicen los entendidos, que a la Inteligencia Artificial de la que todos hablan, no le gusta hablar de emociones y sentimientos. Pongamos en contexto el tema. En sentido figurado conversamos con la inteligencia artificial para conocer ¿por qué hace de menos a la inteligencia emocional?
En otras palabras, queremos conocer si la inteligencia artificial tiene emociones. Los entendidos en la materia dicen que IA tiene muchas ganas de entendernos y nosotros a ella.
En efecto, en especial en la juventud, el sentido crítico y pensamiento estratégico sigue requiriendo de humanos capaces de usar la tecnología, y el kit del asunto. es evitar ser usados por la inteligencia artificial.
En mi opinión ,la IA es necesaria, pero las cualidades tan humanas de la inteligencia emocional como la empatía, la creatividad y la sensibilidad ,etc., seguirán siendo importantes para hacernos mejores preguntas y no solo esperar mejores respuestas, porque una inteligencia emocional alta te ayuda a: colaborar de manera efectiva con los miembros de tu equipo, se puede pensar antes de actuar o reaccionar ,se puede reducir tus reacciones viscerales o impulsos, incluso nos volve
A partir del 2017, los científicos predecían que el desarrollo de la inteligencia artificial está volviendo a la inteligencia emocional más y más importante. Entonces aseguraban que la IA y la automatización/robótica cambiarán los mercados y la fuerza laboral.
Y como este proceso, está incrementándose de manera exponencial, serán muchas las áreas que se verán afectadas: incluso trabajos que nunca pensamos que dejaríamos de hacer los humanos, como en las dos actividades o profesiones más importantes: la educación y la medicina.
Por citar un ejemplo muy visible, Enrique Díaz Cantón, médico oncólogo dedicado desde hace años a la IA en el campo de la medicina, explica que “muchos de los desarrollos de la IA permiten a los médicos hacer diagnósticos más exactos, rápidos y asistiendo al especialista que los llevaba a cabo y eso lo vengo comprobando en diagnósticos ayudados por la inteligencia artificial en mis achaques de mi salud propios de la Vejez y del desorden alimenticio.
Lo que la IA no va a reemplazar, al menos por ahora –aclaró– es el contacto humano con el paciente”. Y lo mismo ocurre con la educación, la IA puede darnos pensando una nueva estrategia educacional pero no podrá desarrollar por ahora, nuestra empatía, escucha, motivación, juicio crítico y cooperación con otros, propias de nuestra inteligencia emocional.
Y no se si por mi escaso uso de la tecnología y de la inteligencia artificial en mis vivencias, actividades diarias o en mi profesión de abogado etc., por ahora, me quedo con la inteligencia emocional.