Pongamos en contexto el tema que avergüenza al mundo:
Mientras los ojos del mundo siguen fijos en la escalada del conflicto entre Israel y Hamas, con Trump al poder en EE. UU. que abiertamente apoya a Israel, y luego de 15 meses de guerra, destrucción y muerte, los espectadores se encuentran abrumados por afirmaciones dudosas que saturan el discurso global.
Al desafío de navegar entre un océano de información fuertemente contaminada, se suma el hecho de que fuentes autorizadas han dado credibilidad a algunas afirmaciones cuestionables que circulan en todos los idiomas y en entrevistas a líderes mundiales que deforman la geopolítica con el anuncio de cese al fuego y la firma de un acuerdo que, a mi juicio, mientras no se cumpla, solo estará en el papel de una guerra milenaria, con un fanatismo religioso sin nombre y con intervencionismo de las potencias extranjeras, habidas por el negocio de armas y extracción del petróleo y oros minerales en la franja de Gaza y otros territorios en discordia.
Lo menos que podemos hacer, además de la protesta y denuncia frente a la abundante información, es citar datos del Banco Mundial que estima que Gaza perdió 18.500 millones de dólares por la guerra. Esto es el 97% del PIB de Cisjordania y Gaza.
De igual forma, los datos estimados de las víctimas palestinas están cerca de 46 mil, según Hamas, que tampoco gozan de confiabilidad. En este horrible magnicidio, un 40% de los muertos eran niños utilizados por Hamas como escudos humanos, y se estima que las muertes o víctimas israelíes, entre civiles y militares, nos arrojan una cifra estimada de 1.400 muertes (cifras no confirmadas).
A esto debe sumarse las pérdidas en viviendas destruidas, la infraestructura básica de agua potable, energía, vías, hospitales, e incluso edificaciones industriales y comerciales, además de los rehenes y prisioneros de guerra que entrarán a negociación para su liberación en el Acuerdo de Paz.
En cuanto al costo aproximado de las operaciones en Gaza, nos da cerca de 51 millones de dólares a razón de 245 millones de dólares por día. Como consecuencia de este brutal gasto, el PIB de Israel se contraerá en un 19,4% (cifras no confirmadas).
Fases del Acuerdo
Sin que el Acuerdo esté escrito en piedra, porque ha sido tendencia la violación de acuerdos y la continuación de ciertas operaciones bélicas camufladas y no difundidas al mundo, en el papel, el Acuerdo tiene tres fases a cumplirse por las partes en conflicto.
Primera fase –
En seis semanas, que comprende:
- El cese de hostilidades
- Intercambio de prisioneros
- Retiro parcial de tropas
- Ayuda humanitaria
Segunda fase:
- Alto al fuego permanente
- Liberación de rehenes faltantes
- Liberación de más prisioneros faltantes
Tercera fase:
Reconstrucción de Gaza
Lo que no está expresamente en el Acuerdo de Paz es quién administrará Gaza después del conflicto armado, que lo considero actos de barbarie y crímenes de lesa humanidad que deben ser juzgados por la justicia internacional, independiente de las fuerzas en conflicto y sin la influencia de los nuevos gobernantes que financian las guerras.
Sirvieron de fuente para hacer este resumen el reportaje internacional de la revista Vistazo – El comienzo del fin, Noticias Reuters, las declaraciones de Trump y mis videos anteriores sobre el conflicto israelí/palestino, que están editados en redes sociales.