Pongamos en contexto el tema.
El solo anuncio del señor presidente Noboa, de pedir cooperación internacional temporal, para que tropas de países amigos operen en Ecuador en el combate al tráfico de drogas y corrupción, trae dos posiciones antagónicas.
La primera: que la intervención extranjera coloca al país en una postal que demuestra que se ha perdido el control del territorio y de su Plan Fénix; y
La segunda: que las fronteras abiertas que están en nuestra Constitución, la tabla de consumo de drogas hoy llamada guía de consumo, los GDO, etc., son problemas heredados y no enfrentados por los gobiernos pasados, que superan la capacidad de nuestras FFAA.
Mi Opinión
La cooperación temporal de Fuerzas Especiales en territorio es vital para la lucha contra el crimen organizado, porque no se tiene una política pública criminal integral, dejando de lado la decantada muletilla de la afectación a nuestra soberanía nacional.
A mi juicio, esos son falsos patrioterismos que tratan de inmovilizar al país, con tufo político.
Ver mi análisis sin sesgos políticos en la web Desde mi Trinchera de Guayaquil.