Chisme y Juzgamiento
El chisme o habladuría es el dar paso a una murmuración sobre otra persona o lo que se supone que ella dijo o hizo. Este chime sólo puede ser malintencionado, pues nadie debe seguir una murmuración de ninguna manera, y peor sin estar seguro de su veracidad.
Los seres humanos, como ya lo dijo Jesucristo hace dos mil años, tenemos tendencia a buscar la pajilla en el ojo ajeno, sin notar la viga que tenemos en el nuestro, y si es factible, para darle más credibilidad o sazón, añadimos algo nuestro, inventado.
Ya de por sí el chisme es malo porque lleva la intención de hacer daño, pero peor es el juzgamiento que acompaña al chisme. Muchas veces ese juzgamiento lleva a condenar a una persona o a una causa, por el simple hecho de murmurar en contra o acerca de ella. El juicio, por lo general, es condenatorio. Quita el beneficio de la duda.