Guayaquil y Posorja
Desde la ciudad del Golden Gate, San Francisco, trabajando con Leigh Fisher en el primer “workshop” del Plan Maestro del futuro gran aeropuerto en Daular que la Municipalidad de Guayaquil pronto hará realidad, me llegan noticias de que el Gobierno Central continúa en sus torpes intentos de frustrar la eterna vocación portuaria de mi querida ciudad. Mientras el Alcalde de Guayaquil y los que conformamos el Gobierno Municipal soñamos y realizamos obras de gran aliento que harán de Guayaquil una metrópoli aún más importante y hermosa que la actual, el Gobierno Central, guiado por dos funcionarios del más alto nivel, nacidos en Guayaquil, hace todo lo posible para minimizarla.
Los inversionistas de Dubai no participaran en la adquisición de las acciones de la Maersk mientras no se derogue el malhadado Acuerdo Ministerial que dio por terminada la concesión al sector privado en Posorja. Este es el paso fundamental para demostrar un cambio en la absurda posición del gobierno y no perjudicar a Guayaquil. Basta de burlas y palabrería barata.