24 noviembre, 2024

Comentario

Gratitud: Una actitud de vida

SER GRATO no es ser guapo, como muchos jóvenes piensan, desean o anhelan. No es el simple galán que desea caer bien a las chicas de turno, al grupo. SER GRATO ES UNA ACTITUD ANTE LA VIDA, algo tan sencillo puede hacer muy feliz, mucho bien a la persona que lo práctica, como a mucha gente que te rodea. Ser grato es saber descubrir los encantos de la vida, el saber ubicarse ante la realidad, ante los demás y ante la realidad última, Dios. Es ser como el sol que sabe dar luz y calor a todos y en todo momento, en el momento oportuno, sabe levantarse temprano y retirarse a su hora, o ser como la luna que sabe brillar por sí misma y a la vez nos revela una luz mayor.

SER GRATO por lo tanto es la actitud de quien sabe dar gracias en el momento adecuado y a las personas debidas. DAR GRACIAS es la respuesta de quien se encontró con LA GRACIA. La gracia de haber encontrado las personas que nos han dado la posibilidad de sentirnos amados, nos ha preparado y nos preparan para amar. Las primeras personas que reflejan esa verdad mayor, esa luz mayor de nuestras vidas son nuestros padres, familiares y amigos, a ellos no solo les debemos respeto y consideración por lo que nos han hecho ser lo que hoy somos, sino ante todo gratitud, como verdadera acción de gracias, sabiendo que nunca podremos corresponder ante tanto amor que nos han dado y que nos dan. Dar gracias es reconocer el valor de la vida.

La ola del mar… Recuerdos junto a Vera Schiller de Khon

“La ola del mar que cae y se funde. No ha pasado nada. Nosotros aparecemos y luego
desaparecemos, como la ola del mar. Es la ley de la no permanencia”. Vera Schiller de
Khon

Llegó al Ecuador en 1939.

Cuando la conocí personalmente en el año 2010, en el estudio de su casa en
la ciudad de Quito, una mezcla de temor y alegría palpitaba en mi corazón.
Acudí a ella luego de dos años de pensar en ir a verla, por sugerencia de una
amiga. Primero leí su libro sobre terapia iniciática, hacía el núcleo sagrado.
Leí también “Zen en el arte del tiro con arco”, libro que la inspiró y que
recomienda en su libro, del autor Eugen Herrigel.

Papá: Dime algo…

“Si no existiera la palabra hijo, buscaría una nueva palabra. Una palabra que
sea pura como el viento”. Es un verso que nos inmortalizó el gran poeta
manabita Horacio Hidrovo, quien acaba de fallecer, en este mes de junio. A él
como padre de familia, como hijo de su madre tierra, Manabí, le dedicamos
estas líneas y reflexiones sobre el Día del Padre, su verso nos invita a pensar
en la pureza, grandeza, fuerza y destino del viento, que es la metáfora
cotidiana que usa don Horacio para plasmar lo bello y puro que es ser PADRE
al pensar en un hijo como la pureza del viento.

Así es queridos jóvenes, ser papá no es fácil, ser papá es un destino que se va
forjando en el día a día de una historia que solo se puede escribir con amor y
ternura, con fuerza y templanza. Ser hijo, tampoco es fácil, cuidarlo hasta los
últimos detalles en su primera infancia, desde que nace hasta los seis años,
nos invita a relacionarlo con lo bonito, todo nos parece bonito, todo nos parece
agradable y por ello lo toco, lo alcanzo. Para llegar a la segunda infancia de los
6 a los 12 años, donde a ese niño todo le parece bueno, por eso lo quiero y lo
deseo, para llegar a la tercera infancia, la más desafiante e importante para
llegar a la verdad, de los 12 a los 18, más o menos, donde todo debe ser real y
no siempre es ni bonito ni bueno. El éxito de un buen papá o mamá o de quien
haga sus veces, como la de un buen educador, educadora es adecuar esa
etapa de la vida con la palabra clave que la caracteriza. Con la bondad, belleza
y verdad en la que nos debemos mover para crecer y ser felices.

Los Niños

Cuando era niña solía jugar al “concurso de belleza” y también a “viajemos a Costa Rica”.

El concurso de belleza lo hacía vistiendo a mis muñecas, sobre todo a Mariquita y a Karyna, con los vestidos que mi abuela Carlota cosía para ellas. Las ponía a todas bien arregladitas, paradas, apoyadas en la pared y empezaba a discernir cuál sería la ganadora.

Viajemos a Costa Rica, lo jugaba con mis primos Rossella y Piero, cuando ellos venían de visita ya que vivían en Esmeraldas. Nos encerrábamos en el amplio closet que yo tenía para guardar los juguetes, ese era el avión. Y de ahí partíamos a Costa Rica. ¿Por qué Costa Rica? Porque ahí vivían nuestras tías, la tía Carmen y la tía Gloria, y tal vez por el deseo de ir a verlas no se nos ocurría otro destino. Pasábamos horas imaginando el viaje, “metidos en el avión”.

Los hijos se van, las madres se quedan

GRACIAS A AURITA, una amiga que nos deleita con su belleza humana y nutre nuestro espíritu cada semana con oraciones, power point, vídeos, reflexiones, etc. Comparto hoy, en HONOR A TODAS LAS MADRES ACTUALES Y POTENCIALES, LOCALES Y MUNDIALES, esta reflexión sobre los hijos, lo más bello que pudo hacer mamá, el ser co-creadora con Dios para dar vida, y desde allí agasajar a todas las madres con un gracias por estar ahí, por permanecer siempre a nuestro lado, por ser guía, consejera, amiga y el manantial de ternura que los hijos buscamos siempre, después de nuestros viajes, caídas o éxitos. FELIZ DIA DE LA MADRE. GRACIAS MAMÁS.

LOS HIJOS SE VAN, hay que aceptarlos con esa condición, hay que criarlos con esa idea, hay que asumir esa realidad. No es que se van. LA VIDA SE LOS LLEVA, (están hechos para crecer y volar). Ya no eres su centro. Tienes que haber cuidado sus raíces y podado sus alas. No eres propietaria, sino consejera. No diriges, aceptas. No mandas, acompañas. No proyectas, respetas. Necesitan otras perspectivas, otro amor. Necesitan alas y volar muy alto. Ya les crecieron raíces y maduraron por dentro, (gracias a tus cuidados, querida Madre).

Problemas Familiares – ¿Crecimiento o destrucción?

Mirar la vida con optimismo es la primera tarea de los padres y madres de
familia, mucho más de los educadores y líderes religiosos. El punto está
en cómo hacerlo. ¡Hay tantos problemas familiares! ¿Cómo conciliar la
singularidad de cada uno, de cada hijo con la necesaria unidad familiar? ¿Cómo
atender la individualidad y necesidad de cada estudiante con la preocupación
de la totalidad de la clase? Verdaderamente no hay recetas, ni soluciones
simplistas.

Sembrar la actitud de optimismo depende de las personas más cercanas que
se encuentren los hijos y los estudiantes, y ello requiere saber mirar con
profundidad y en totalidad la perspectiva de la vida, de la condición humana.
La cosa se agrava con casos muy dolorosos de disfuncionalidad familiar, de
agresividad juvenil y cerrazón al diálogo, al consenso. Veamos un caso, para
ver cómo podemos cada cual prevenir y caer en la cuenta de nuestros fallos
y errores, para crecer y no destruir la necesaria relación de crecimiento que
presenta cada situación problemática. Veamos un caso.

Nancy

Nació en una hacienda cercana al cantón Chone. Manaba machetera quien a los cinco años un veintitrés de marzo perdió al ser que mas la quería, su abuela María. A los nueve su mamá, mi abuela, quien no podía domar a este ser indomable la envió interna a Quito, al prestigioso colegio de Los Sagrados Corazones de Rumipamba. Un año entero su madre, mi abuela, no la vio. Quien se encargaba de llenar el arca del afecto filial era mi abuelo. Él fue por mucho tiempo madre y padre a la vez de esa niña rebelde, cuya mirada veo hoy, día tras día, reflejada en los ojos de la menor de mis hijas.

Una profunda mirada, siempre llena de incógnitas, invadida de amor.

José de Silva y Olave

Hace pocos días visitando la biblioteca de una entidad particular me fue mostrada una pintura del obispo José Vicente de Silva y Olave. Personaje guayaquileño que yo no conocía. Como llamó mi atención su importancia decidí que siendo nuestro coterráneo debía hacer un artículo para conocimiento de los lectores. Según el crítico de arte que lo analizó, se trata de una obra pictórica del quiteño Antonio Salas Avilés, realizada muy probablemente por un encargo de nuestro gran prócer José Joaquín de Olmedo, vinculado al obispo, no solo familiarmente sino porque en 1794 como Canónigo Magistral de la Catedral de Lima, dirigió sus estudios en la Universidad de San Marcos.

Se trata de las muy pocas obras que se salvaron de los numerosos incendios de Guayaquil, que ha sido conservado en su familia por generaciones. Rodolfo Pérez Pimentel escribe que: “Dicho cuadro estuvo por muchísimos años en la antigua Catedral de Guayaquil hasta que fue destruida en los años 20 para construir la moderna de cemento armado que existe hoy. Isabel María Yerovi de Matheus, presidente del Comité de Damas pro reconstrucción de la Catedral, lo envió a Clemente Pino Ycaza, quien lo lució en su Biblioteca.” Hasta que a su fallecimiento pasó a su hijo Clemente Pino Gómez.

“Cultura y Fraternidad ¡Al maestro ecuatoriano!”

Una vez más Cultura y Fraternidad, Agrupación que me honro en presidir, se hace presente en homenaje al Maestro ecuatoriano, en un acto, que revela nuestra preocupación por los aconteceres culturales y sociales de la Patria.

El dedicarle un acto de homenaje al maestro ecuatoriano, significa la concepción grande que tenemos, por la legión magisterial representada en cada hombre o mujer: titanes formadores de nuestra nación, que desde allende el mar, montañas y selvas, en pueblos hoy con ríos desbordados y deslaves mortales, hasta a los barrios urbanos y suburbanos de nuestras ciudades, cumplen la gran tarea formadora de niños y jóvenes ecuatorianos.

Maestros sembradores que van llevando sabiduría científica y espiritual a su alumnado, ante quienes les toca oficiar.

Mujeres

When Mary Met Audrey

Existe por ahí un chiste que dice en pocas palabras lo que el machismo imperante en nuestra sociedad dictamina: ¿cuántas neuronas hay en el cerebro de una mujer? ¡Cuatro! Para las cuatro hornillas de la cocina.

Y luego de contar el chiste padres e hijos se ríen, jaja. ¡Qué buen chiste!

A mí me parece algo muy estúpido porque además de que la intención es desmerecer la capacidad de la mujer para hacer muchas más cosas que encender las hornillas de una cocina, desmerece una de las actividades más gratas para muchas mujeres, preparas una rica comida para su familia.

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