El dolor es inevitable pero el sufrimiento es opcional
En estos tiempos es muy probable que ser feliz sea un anhelo para muchos y una realidad para otros, una quimera para algunos y una auto-realización para otros.
Vivimos en tiempos difÃciles, es cierto, crisis económicas, polÃticas sociales, el desempleo aumenta, las enfermedades atacan nuestro cuerpo, atravesamos dolorosas pérdidas, familias que se desintegran. Parece haber más de un motivo para concluir que ser feliz es la dicha de unos cuantos.
En mi concepto, la felicidad no se mide por cuánto tienes, ni hace distinción de razas, tendencias polÃticas o grupos sociales. Yo creo que ser feliz es la capacidad de optar por la propia realización personal en circunstancias en que otros optan por la locura, el lamento o el dolor. Es la elección de ver el lado positivo donde parece no haberlo, ver la mitad del vaso lleno donde otros sólo verÃan la mitad de un vaso vacÃo.